Según las estimaciones, la inflación de septiembre en Argentina se espera que sea del 11% o incluso superior. Esto se debe al impacto de la devaluación del peso argentino después de las elecciones primarias y su efecto en los precios. En agosto, la inflación alcanzó el 12.4%, la cifra más alta desde 1991, y se espera que los efectos de la devaluación se sigan sintiendo en septiembre. Además, los incrementos en los precios regulados, como colegios, combustibles y prepagas, también contribuirán a la inflación del mes. Las estimaciones de diferentes consultoras indican que la inflación mensual podría rondar el 12% y el acumulado anual llegaría al 136%. Aunque se observó una moderación en el comportamiento semanal de los precios a lo largo del mes, esto refleja un reacomodamiento puntual a la modificación de los tipos de cambio.