En medio de la incertidumbre generada por las medidas económicas y el plan de shock anunciado por el gobierno de Javier Milei, Eduardo Belliboni, líder del Polo Obrero, confirmó la movilización prevista para el 20 de diciembre. Esta acción de protesta se posiciona en contra del ajuste y la liberación de precios propuestos por el mandatario.

El dirigente social expresó su descontento ante lo que considera una "criminalización de los movimientos sociales" por parte del nuevo gobierno. La movilización, que coincidirá con el vigésimo segundo aniversario del estallido social de 2001, busca ser una "gran fecha de unidad" en la que manifestarán en contra de las políticas de ajuste.

Belliboni destacó que el problema no radica en los cortes de calles, como el Puente Pueyrredón, sino en el ajuste que planea implementar Milei. Afirmó que defenderán "el derecho a manifestarse" frente a las medidas que impactarán en las clases populares.

Las tensiones entre las organizaciones sociales y el gobierno se intensifican, especialmente después del mensaje contundente de Milei durante su primer discurso como presidente, donde afirmó que "el que corta la calle no cobra". Belliboni considera estas declaraciones como parte de una "campaña de criminalización" y critica la comparación del movimiento piquetero con el narcotráfico.

En este contexto, la movilización del 20 de diciembre se presenta como un primer acto de resistencia contra las políticas de ajuste propuestas por el gobierno de Milei. La situación promete tensión en las calles y podría marcar el inicio de una serie de conflictos entre el Ejecutivo y los movimientos sociales.