Este lunes, diversos movimientos sociales agrupados en la Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) y organizaciones de izquierda llevarán a cabo un "piquetazo nacional", con la intención de efectuar 500 cortes en distintos puntos del país y bloquear los accesos a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La principal demanda se centra en la provisión de alimentos para comedores y merenderos comunitarios, bajo la consigna "El hambre es el límite".

El Ministerio de Seguridad de la Nación, a cargo de Patricia Bullrich, ha anunciado que aplicará el Protocolo Antipiquetes y desalojará a los manifestantes en caso de cortes en calles, avenidas o puentes.

Los cortes se llevarán a cabo en cinco accesos a la Ciudad de Buenos Aires: el Puente Pueyrredón en Avellaneda, Ruta 3 y General Paz en La Matanza, General Paz y Rivadavia en Liniers, y el Puente de Autopista Saavedra. Además, se espera una interrupción total en un tramo de la Autopista Buenos Aires La Plata.

Los reclamos abarcan no solo la entrega de alimentos, sino también aumentos en los planes sociales y la protesta por la eliminación del ex programa Potenciar Trabajo. Según los dirigentes sociales, esta acción se realiza debido a la falta de respuesta del gobierno frente a la emergencia alimentaria y el ajuste a la economía popular.

Entre los movimientos convocantes se encuentran el Polo Obrero, el Frente Popular Darío Santillán, el Movimiento Evita, la Corriente Clasista y Combativa, y el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), entre otros.

Las autoridades de gobierno, por su parte, argumentan que se han tomado medidas para mejorar la distribución de alimentos de manera transparente y eficiente, y han eliminado la tercerización en la entrega de asistencia social, pasando el control directamente al Estado.