El arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, monseñor Jorge Ignacio García Cuerva, presidió la tradicional misa de la Peregrinación Juvenil a la Basílica de Luján, donde hizo un llamado a la unidad y destacó la importancia de recuperar la esperanza y la alegría en tiempos de crisis.

Ante cientos de miles de personas que se movilizaron durante la 49ª Peregrinación Juvenil a Luján, García Cuerva expresó la necesidad de unirse como pueblo y confiar en las manos de la Virgen María para superar las dificultades que atraviesa el país.

X de Gonza Carranza 🏳️‍🌈

El arzobispo mencionó la situación económica y social de Argentina, haciendo referencia a los altos índices de pobreza, la indigencia, la drogadicción y la soledad de los ancianos, entre otros problemas. También destacó la importancia de la fraternidad y llamó a dejar de lado la descalificación, la intolerancia y la violencia.

La peregrinación, que contó con la participación de más de 60 puestos sanitarios y la colaboración de organismos públicos y privados, fue acompañada por el clima electoral, con carteles que reflejaban la polarización política del país.

El arzobispo García Cuerva y el padre Juan Bautista Xatruch caminaron junto a los fieles durante todo el trayecto hasta Luján, en un hecho inédito para un arzobispo porteño.

En resumen, la Peregrinación Juvenil a la Basílica de Luján fue un momento de encuentro y reflexión para miles de personas, donde el arzobispo García Cuerva hizo un llamado a la unidad y a confiar en la Virgen María como fuente de esperanza y fortaleza en tiempos difíciles.