Alberto Fernández ha presentado su renuncia a la presidencia del Partido Justicialista (PJ) en medio del escándalo relacionado con una denuncia por presunta violencia de género hecha por la ex primera dama, Fabiola Yañez. Fernández, que había estado de licencia desde marzo, expresó en su carta de dimisión que su decisión es "indeclinable" y tomada para evitar que el partido se vea afectado por los hechos que considera falsos.

El ex presidente mencionó en su carta que su decisión busca proteger al PJ de los efectos negativos del "linchamiento mediático" del cual se siente víctima. Fernández subrayó su compromiso con el partido y con la igualdad de género, y lamentó que la situación haya afectado también a sus hijos.

El apoderado del PJ, Eduardo López Wesselhoefft, confirmó que la renuncia fue recibida oficialmente y es distinta a la carta que había trascendido anteriormente. El partido, a través de su estructura en la Ciudad, también tomó distancia y repudió la violencia de género, destacando la necesidad de apartar a Fernández para continuar con la reorganización del partido.

El Partido Justicialista, bajo la presidencia de Mariano Recalde, expresó su postura firme contra la violencia de género y subrayó que la renuncia de Fernández es un paso necesario para reconstruir la fuerza política y ofrecer una alternativa de gobierno que represente la esperanza del pueblo argentino.