La economía argentina enfrenta una profunda crisis inflacionaria, con el Gobierno kirchnerista acumulando un asombroso 850% de inflación desde que volvió al poder, y un incremento de hasta el 168% bajo el liderazgo de Sergio Massa en el Ministerio de Economía.

Fuente: La Derecha Diario
Fuente: La Derecha Diario

A pesar de las promesas y compromisos asumidos en agosto del año pasado, donde se prometía controlar la inflación, mantener la actividad económica y ordenar las cuentas públicas, ninguno de estos objetivos se ha cumplido. La tasa de inflación interanual ha superado el 138% al cierre de septiembre, y en los precios mayoristas la inflación ha alcanzado el 140%.

La consecuencia directa de esta situación es que los salarios de la población no logran mantener el ritmo de los incrementos de precios, lo que ha llevado a una pérdida significativa del poder adquisitivo de los argentinos. El aumento de costos y la incertidumbre económica han generado un escenario donde los comerciantes no saben a qué precio vender su mercadería debido a los constantes aumentos en los costos de reposición.

En lo que va de la gestión de Alberto Fernández y Sergio Massa, la inflación ha acumulado un asombroso 850% desde diciembre de 2019, abarcando los primeros 47 meses de su mandato. Este número es prácticamente el triple de la inflación acumulada durante el mismo período de la administración del expresidente Macri.

Además, bajo la supervisión de Sergio Massa en los últimos 15 meses, los precios se han disparado hasta un 168.8%. Esto significa un incremento cuádruple en comparación con los primeros 15 meses de la administración Macri, lo que pone en evidencia el fracaso de la propuesta del kirchnerismo en las elecciones próximas.

La inflación ha afectado especialmente a la canasta de alimentos y bebidas no alcohólicas, con un aumento del 150.1% en los últimos 12 meses. Este componente es fundamental para la canasta de consumo de los segmentos con ingresos más bajos, y los precios de alimentos han llegado a incrementarse en un sorprendente 154% en la Región Noroeste del país.

Los sectores de hoteles y restaurantes han experimentado un aumento del 161% en todo el país en el último año, con un 166% en la Región Pampeana. Los precios de los servicios públicos han aumentado un 139%, la salud un 139.1%, y la indumentaria ha visto un incremento cercano al 120%.

Sin embargo, la preocupación se profundiza hacia el final del año, ya que las proyecciones de diferentes entidades financieras y consultoras privadas anticipan un fuerte devaluamiento del tipo de cambio oficial que podría oscilar entre los $600 y $900 a fin de año. Este escenario podría llevar al país a una crisis de hiperinflación.

La inflación mensual podría superar el 50% para diciembre, dejando a Argentina en una situación preocupante sin moneda, ahorro o crédito, y con expectativas desestabilizadas. El futuro económico del país está lleno de desafíos, y la inflación desenfrenada es solo uno de los problemas que enfrenta la nación.