La Argentina ha sido pionera en leyes que apuestan a que mujeres y disidencias accedan a derechos y oportunidades en iguales condiciones que los varones. Sin embargo el camino es largo. Mujeres mineras de la ciudad resisten y luchan por más legislaciones que avalen la igualdad en su mercado laboral.  

El Día Internacional de las Mujeres Trabajadoras se conmemora este 8 de marzo de 2023, un año en el que también se cumplen 40 años de democracia ininterrumpida en Argentina. Nuestro país ha sido pionero en materia de igualdad de género y diversidad de la región pero se debe continuar trabajando en pos del cumplimiento de todas las legislaciones vigentes y en la creación de otras que garanticen el acceso.

Según WIM Argentina (Women in Minning Argentina por sus siglas en inglés), y en base a un informe de la Secretaría de Minería de la Nación y el Sistema de Información Abierta a la Comunidad (Siacam), la industria creció en la generación de empleo durante el año pasado y así también la representación femenina en el mercado laboral minero que representó 10,5% del total con 3.911 empleadas. Santa Cruz encabezó el primer lugar respecto a la participación de mujeres en la actividad.

 Para este 8 de marzo, desde AOMA Olavarría gremio que conduce Alejandro Santillán, hemos decidido reunir para este día a tres mujeres que cumplen tareas en la industria y la minería en el partido de Olavarría. Conocer cuál fue el camino recorrido, qué significa el 8M, cuáles son las resistencias actuales y qué falta aún por conquistar fueron algunas de las expresiones vertidas para esta nota.

"Queda pendiente incluir a la mujer en la línea de producción sin exigir experiencia previa", "lo que falta es que falta una legislación que apoye la equidad entre hombres y mujeres en el ámbito laboral" y "se está tratando y trabajando para que la mujer tenga más participación en las fábricas", fueron algunas de las conclusiones de las referentes.  

El 8M en cementeras y canteras

Miriam Senmartin trabaja para Sertec Global, una empresa de limpieza industrial edilicia liderada por mujeres. "Mi puesto laboral está en el edificio de control de calidad y desde mi lugar en una cementera el 8M se conmemora en un espacio más participativo a la hora de luchar por los derechos femeninos y (para erradicar las) desigualdades además de apoyar la participación y promover la igualdad de género". 

Senmartin tiene además otra responsabilidad sobre sus espaldas: la de ser delegada gremial desde agosto de 2022. "Eso me posibilitó tener acceso a concurrir a congresos donde se exponen las problemáticas y poder escuchar diferentes posiciones, planteos y reclamos. Todo apunta a la lucha a acortar la brecha con sectores que fueron por años netamente masculinos".

Nelba Porcel cumple tareas en la empresa Galasur S.A. desde el año 2017, actualmente como volquetista. Es auxiliar en Seguridad e Higiene, además de operaria de retroexcavadoras, frontales y autoelevadores. "He trabajado en diferentes sectores, en producción, en el destape y actualmente en el lugar más movedizo en planta, para la distribución de materiales", explica. 

"El 8M desde de la profesión durante la jornada laboral es un día mas. Por otro lado, en estas fechas, tengo el honor de que desde el Ministerio de Producción, de Mujeres, de Minería y de WIM Argentina, una organización internacional de voluntarias comprometidas con el avance de las mujeres en el sector minero, me inviten a participar con diferentes acciones o dar una reflexión sobre la mujer y la minería".

Por su lado, Patricia Díaz trabaja hace nueve años en Cementos Avellaneda en limpieza industrial de oficinas y conmemora "con orgullo el 8 de marzo, dado que gracias a mi labor vivo de manera independiente". Destaca satisfecha que "estoy adherida a un sindicato en el cuál hoy nos representa una delegada, orgullo para AOMA, ya que fue elegida democráticamente"

Asegura que "se trabaja para que la mujer tenga más participación en las fábricas y creo que con buen diálogo se podrá llegar a buen fin". En base a su recorrido profesional laboral y todo lo que le ha posibilitado ese espacio, Patricia es consciente de que "lamentablemente no todas las mujeres pueden decir lo mismo, ya que hay tareas no muy bien pagas", en otros ámbitos.

De luchas y resistencias 

Miriam destaca que, en su caso, dentro de la planta "sólo me han demostrado compañerismo y respeto, tanto de la jefa responsable del sector como de todos los que allí trabajan. Esto pasa en toda la fábrica", destaca con orgullo Miriam. "El respeto para con las mujeres es de igualdad total. Y desde mi lugar gremial trato estar de manera diaria ante cualquier requerimiento de mis compañeras de que las cosas sean equitativas, que se provean a las compañeras los mismos beneficios posibles que a los compañeros y cualquier reclamo que requiera intervención gremial. Cuento asesoramiento de miembros de comisión directiva y delegados de diferentes plantas cementeras".

Porcel expresa que "si bien no soy integrante de la conducción del gremio, tengo una excelente relación y apoyo en todas mis inquietudes y necesidades. Me tienen en cuenta en varios aspectos y soy material de consulta para algunas ocasiones como también he sido invitada para integrar la lista".

Aún hoy en el siglo XXI "la principal lucha es la igualdad de oportunidades a la hora de ingresar al circuito laboral. Debido a que desde las empresas y la consultoras cuando surge una vacante generalmente ocupan a hombres, aunque no tienen la correspondiente capacitación siendo que hay muchas compañeras que han pasado por Escuelas Técnicas o Institutos Tecnológicos o que han hecho los cursos de manejos de maquinarias pesadas que las habilita para las tareas. Somos muy poquitas en la región las que hemos logrado trabajar en alguna empresa".

Patricia destaca que "se está luchando y se sigue buscando la igualdad de género. Se han logrado cosas buenas, pero aún hay que seguir tratando de que se reformen algunas leyes". Al igual que Senmartin prioriza el trato de "jerárquicos y obreros dado que Sertec Global está compuesta por gente solidaria y comprensible". 

Todavía queda camino por andar

Senmartin aclara "la voz de la mujer se escucha e impone cada día con más fuerzas pero para llegar a la igualdad hay mucho por recorrer todavía. Si bien en mi lugar trabajo veo que la empresa ha flexibilizado la inserción femenina en puestos jerárquicos con títulos universitarios y de seguridad e higiene, sostengo en mi humilde opinión, que aún queda pendiente incluir a la mujer en la línea de producción sin exigir, a la hora de firmar contratos, experiencia previa. Muchas compañeras han logrado capacitarse para desarrollar muchos puestos en las empresas".

La delegada gremial está convencida que "la experiencia se logra con dar esos espacios que hoy solo se ven reducidos al trabajo masculino. Es importante que haya puertas abiertas generando espacios de contención acompañamiento y políticas que posibiliten la lucha de la igualdad en espacios liderados por hombres".

Nelba está convencida que "la resistencia para este 2023 es no darnos por vencida en el objetivo de que se modifiquen las leyes, para que las mujeres tengan las mismas oportunidades e igualdades y derechos a tener un trabajo digno, bien remunerado dentro del sector de la minería en cualquier puesto, ya que generalmente lo único que se ofrece son tareas de administrativas o de maestranza. Sin embargo somos muchas las capacitadas, como en mi caso, para operar cualquier tipo de equipo". 

Agrega que "desde el Foro de Mujeres Mineras de Olavarría se ha logrado generar conciencia de que son muchas las mujeres que desean trabajar en el sector y que quieren ser tenidas en cuenta. Hemos hablado con políticos, dirigentes gremiales, empresarios, hemos ido a congresos, jornadas, encuentros, foros nacionales e internacionales como participantes exponiendo la gran capacidad y las ventajas que tiene la mujer a la hora de laborar. Lo que falta es que falta una legislación que apoye la equidad entre hombres y mujeres en el ámbito laboral, camino difícil pero no imposible".

Reflexión final

Sobre el final, Miriam Senmartin agradece "la posibilidad que me brindan de aprender día a día participando de eventos que me permiten absorber conocimientos para tratar de no cometer errores y siempre predispuesta a colaborar en lo que ellos consideren que les puedo ser útil. Feliz 8M a todas y cada una de las mujeres que luchan a diario por un lugar laboral donde deseen desempeñarse".

Por su lado, Nelba apuntó "como reflexión final que me gustaría cambiar lo que a mi se me hizo muy difícil. Después de haberme recibido, visite con mi currículum vitae a las empresas y consultoras. Por lo general me atendieron bien, pero cajonearon o no le dieron importancia, por lo que estuve que insistir muchas veces hasta lograr el objetivo, solo por ser una mujer. Deseo una Argentina mejor con mucho trabajo, con igualdad de oportunidades sin importar el género o el sexo".

En el cierre, Díaz deja un mensaje de esperanza. "A todas las mujeres les digo que no bajen los brazos, no dejen de soñar. Es una lucha diaria y todo llega. Voy a cumplir 62 años en abril y agradezco a la vida todo lo vivido, de los errores también aprendí y de lo bueno lo disfruto. Feliz día a todas, siempre para adelante..."

Por qué el 8 de marzo

Un día como hoy pero de 1908, un total de 129 mujeres murieron en el incendio de la fábrica Cotton situada en Nueva York tras haberse declarado en huelga con permanencia en la planta. Los reclamos tenían que ver con las malas condiciones laborales, reducción de la jornada de trabajo y un salario de igualdad al que percibían los varones. El propietario ordenó cerrar las puertas y generó un incendio para obligarlas a desistir. El 3 de mayo de ese año quedó instituido el Día de la Mujer.

En 1911 se produjo un hecho de similares características pero un 25 de marzo. Unas 149 personas, la mayoría mujeres, murieron en otro incendio pero en este caso de la fábrica Triangle Shirtwaist Company en la misma ciudad.

La historia de las mujeres trabajadoras no empezó ahí ni tampoco terminó. También un 8 de marzo, pero de 1857 las "garment workers" salieron a las calles de Nueva York en una de las primeras manifestaciones feministas donde las fuerzas policiales las reprimieron. En 1859 fundarían el primer sindicato. 

(El original de esta nota puede encontrarse en http://aoma-olavarria.com.ar)