Daniel Puertas

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Roberto Elíseo "Mono" Castilla Rocha admitió en una declaración ante la Justicia haber sido el autor material del asesinato de abogado Marcos Alonso, cometido en enero del 2010 en Olavarría, dio detalles sobre la presunta organización delictiva integrada por delincuentes y policías, identificó a quienes en su versión fueron los autores intelectuales del crimen e intentó desincriminar a su hermano Reinaldo Gabriel y a Juan Ramón "Johnny" Ibáñez, el otro condenado a prisión perpetua junto con él por ese hecho.

Castilla Rocha declaró por videoconferencia desde la cárcel de San Martín el último jueves, según confirmó a este diario el propio recluso. Señaló que su testimonio se extendió desde las diez y media hasta la una y que no se extendió todavía más porque "era tarde y ellos se tenían que ir". Esos "ellos" debían ser al menos el fiscal Cristian Urlézaga, quien instruye la causa contra Reinaldo Gabriel Castilla Rocha, hermano del "Mono", detenido hace pocas semanas, el juez de Garantías Carlos Villamarín y la abogada defensora.

Fue precisamente la captura de Reinaldo Castilla Rocha lo que desencadenó la serie de acontecimientos que nadie sabe dónde puede desembocar en una historia sórdida que conmovió la ciudad diez años atrás y nunca terminó de ser bien aclarada.

Roberto Elíseo Castilla Rocha decidió contar lo que a su juicio es la verdad para desincriminar a su hermano, al que definió con voz alterada por la pena como "un pobre y triste laburante" que se vio implicado en un crimen terrible "por mi culpa".

Al dar cuenta de su declaración, el "Mono" aseguró que indicó el escondite de tres armas de fuego entre las cuales se encontraría la que disparó los proyectiles que segaron la vida de Marcos Alonso. Si estas son halladas habrá un elemento muy fuerte par avalar los dichos del autorreconocido como sicario.

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