"La Bourse de Comerce - Pinault Collection" abrirá al público mañana sábado y promete sorprender con un espectacular edificio de planta circular y cúpula de hierro, con el sello de arquitecto Tadao Ando y el interiorismo de los hermanos Bouroullec. No contará con una muestra permanente y se nutrirá esencialmente de las adquisiciones del magnate de la moda, dueño de una de las grandes fortunas de su país y propietario del conglomerado de marcas de lujo Kering, que incluye a Saint Laurent, Gucci y Bottega Veneta, según consigna el diario El País.

"Al principio fue solo un sueño que parecía irrealizable. Luego, ese sueño se convirtió en ambición. Y esa ambición se ha transformado, hoy, en realidad", definió Pinault al referirse a la apertura del museo, un año más tarde de lo que estaba previsto por la demora que generó la pandemia.

La impronta industrial del edificio se mantuvo y sus creadores han jugado con el nacimiento de la globalización y del capitalismo para dialogar con las obras, todas ellas contemporáneas.

La apuesta contemporánea del museo es tan clara que de todos los artistas que participan en este primera colocación, solo dos han fallecido: el alemán Martin Kippenberger, y el fotógrafo y plasticista francés Michel Journiac. La californiana Ser Serpas, de 26 años, es la más joven y expone una obra pictórica de trazos difusos sobre la transformación de un cuerpo masculino a femenino.

Entre las casi 200 obras de 32 artistas que componen "Ouverture", el título de esta muestra inaugural, está la colección completa de Pinault del artista "radical e intransigente" estadounidense David Hammons.

Bajo la cúpula central y un fresco decimonónico restaurado, se ubican una serie de estatuas de cera monumentales que serán encendidas con la primera exposición hasta fundirse seis meses después para ser sustituidas por nuevas velas, para dejar en claro el espíritu de renovación que propone Pinault.

También cambiará todos los años la muestra artística que se presenta en las 24 vitrinas de madera de la galería principal, que en la apertura ocupa el francés Bertrand Lavier, quien presenta una serie de esculturas que convierten a los objetos cotidianos en arte. Télam