Quizás la mayoría de la población ni siquiera los tenga en cuenta cuando se mira el abordaje de esta pandemia, que atraviesa el planeta con el nombre de coronavirus. Pero la kinesiología constituye un eslabón imprescindible en el tratamiento de los y las pacientes en los estadíos críticos de la enfermedad.

Ellos ocupan un lugar clave en la guerra ante este enemigo invisible que sólo se hace ver a través de los microscopios, y en el Hospital Municipal "Dr. Héctor Cura" todo está preparado para hacerle frente, llegado el caso.

El nosocomio local, en el pabellón "Diego Lamberto", cuenta con 8 kinesiólogos de planta, bajo la conducción del licenciado Marcos Seveso, Jefe del Servicio de Rehabilitación: en el día a día cuatro trabajan en consultorios externos, dos en internación de adultos, dos en pediatría y otros dos en UTI (cuidados críticos). Más tres terapistas ocupacionales.

Para este tiempo sanitario especial que atraviesa la Ciudad, el organigrama fue rectificado sustancialmente.

"Lo bueno de esto es que empezamos a actuar rápido con la perspectiva que nos dio lo sucedido en Europa, pero no sólo nosotros, sino el sistema de salud en general", aclaró el licenciado Seveso.

Desde que se desató la pandemia el Hospital suspendió todos los turnos programados, y en consultorios externos sólo se atienden las urgencias y la internación.

"Tenemos la suerte de que toda la parte de adultos la va a coordinar el licenciado José Elzstein, que es el único de nuestro grupo que está formado en kinesiología intensivista, avalado por la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (SATI)" subrayó Seveso.

Extra coronavirus, en la terapia intensiva del Hospital hay dos kinesiólogos, más uno de apoyo.

Durante todo este tiempo, el licenciado Elzstein llevó adelante reuniones de capacitación con sus pares. "Se nos hizo hincapié en las normas de bio-seguridad, desde el lavado de manos, cómo vestirse, cómo entrar", comentó.

Lo primero parece una cuestión básica, pero no es tan así. En Europa (en especial en Italia y España) hay muchos profesionales de la salud infectados y es lo primero que se pretende evitar.

  • Preparar un equipo, asistir para entubar, leer o setear un respirador, maniobras de mantenimiento de la vía aérea del paciente son las labores básicas para tener éxito en el tratamiento y evitar complicaciones.

El equipo de kinesiólogos participó en las jornadas de capacitación dentro del Hospital sobre normas de bio-seguridad, y Elzstein administró los protocolos de trabajos emanados de la Organización Mundial de la Salud y la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva.

"Todo el servicio participó de las jornadas de capacitación que nos brindó el Hospital sobre bio-seguridad. Por nuestra parte el licenciado Elzstein nos capacitó sobre protocolos kinésicos actuales de la OMS y la SATI" subrayó.

"Ojalá nunca sea necesaria nuestra participación, pero nosotros estamos organizados, capacitados y esperando por si nos llaman a actuar" dijo Seveso.

"Como grupo de trabajo, la idea es cuidarnos entre nosotros, y después no desgastarnos en lo físico, ni en lo psicológico, para el buen funcionamiento de todos los que formamos parte del servicio" señaló.

Como invitada a estas capacitaciones estuvo la licenciada Andrea Dilascio, que trabaja en el ámbito privado. "Estamos muy agradecidos a los kinesiólogos de Olavarría que me han llamado para colaborar con la atención de los pacientes en caso de que sea necesario" destacó.

Seveso no quiso cerrar la charla sin ponderar que en este momento histórico de la salud universal, y olavarriense en particular, "en el Hospital Público nos sentimos una gran familia, desde el secretario de salud hasta el último eslabón de la cadena. Todos estamos trabajando unidos, apoyados, en equipo, en capacitación continua y preparados para lo que venga".