El Municipio, con los colores de la bandera ucraniana
Así lo confirmó el intendente Ezequiel Galli en Twitter ayer por la noche. La invasión de Rusia a Ucrania ya cumple su tercer día consecutivo. Cientos de personas murieron, miles resultaron heridas y otras debieron desplazarse y refugiarse en distintos países.
"Hoy nuestra @MuniOlav se "pintó" de los colores de la bandera de #Ucrania @UKRinARG #StopWar", escribió el intendente municipal Ezequiel Galli en Twitter.
No es la primera vez que el jefe comunal habló sobre la invasión de Rusia a Ucrania. Horas antes había dedicado un posteo sobre el trabajo periodístico de una olavarriense en Kiev. "Que gran cobertura de la invasión Rusa a Ucrania la de @SolMacaluso. Gran embajadora de nuestra #Olavarria mostrando profesionalismo y mucho coraje!".
La primera expresión pública de Galli fue el viernes. "Mi hijo de 11 preocupado por que si hay guerra, se suspende el mundial. Si supiera el quilombo económico a nivel global que va a generar la invasión de Putin a Ucrania. Argentina, siempre del lado incorrecto, para no perder la costumbre. #StopRussianAggression"
Crisis humanitaria
El ministro de Salud de Ucrania Viktor Liashko en Facebook informó este sábado de 198 civiles muertos, entre ellos tres niños, y un millar de heridos desde el inicio de la invasión rusa el jueves.
Se trata del segundo parte de fallecidos que publica el Gobierno ucraniano tras el que anunció el jueves por la noche el presidente Volodímir Zelenski, cuando dijo que el primer día de la ofensiva militar dejó 137 muertos.
Por su lado, Naciones Unidas quiere "un acceso seguro y libre" para la ayuda humanitaria en Ucrania, según dijo el viernes su secretario general adjunto para Asuntos Humanitarios, Martin Griffiths.
Los trabajadores humanitarios deben poder disfrutar de "protección" cuando llevan ayuda a la población "en todas las regiones de Ucrania afectadas por el conflicto", reclamó Griffiths en conferencia de prensa. Según la ONU, unas 100.000 personas ya resultaron desplazadas por el conflicto.
"Esperamos otros 1,8 millones o incluso más" en el futuro, advirtió el funcionario, quien precisó que no necesariamente todas esas personas necesitan ayuda humanitaria.