En caso de detección de alguna patología o la necesidad de seguimiento, los profesionales recomiendan la continuidad de los estudios previstos por fuera de la campaña.

El cáncer bucal cobra la vida de miles de personas cada año. La detección y el tratamiento temprano aumentan las posibilidades de recuperación total. Un auto-examen regular puede ayudar a descubrir lesiones potencialmente cancerígenas. Es importante prestar atención a las distintas señales de alarma.

Las manchas blancas, rojas o pigmentadas; una herida que tarda en cicatrizar (que no se curan dentro de los 7 a 14 días) y sangra con frecuencia y facilidad; bulto o engrosamiento de los tejidos de la boca y o el cuello; dolor de garganta crónico o ronquera; dificultad para masticar o tragar son algunas de ellas.

Es recomendable realizar este autoexamen cada 5-6 meses como mínimo, en un sitio bien iluminado. Ante cualquier hallazgo, acudir al odontólogo de confianza. Es muy importante tener en cuenta que la detección temprana del cáncer bucal y un tratamiento a tiempo pueden salvar muchas vidas.

Durante estos días, los chequeos estuvieron a cargo de los odontólogos Ramiro y Rodrigo Campagnale, Lucas Varalli y Nelly Ladner.