La diputada por el Frente Renovador Liliana Schwindt se mostró en contra de un nuevo feriado en 2015 y así se manifestó al referirse al dictamen de mayoría firmado en la Comisión de Cultura de la HCDN, por el proyecto por el cual se propone que el 29 de junio de 2015 sea feriado nacional, por conmemorarse ese día los 200 años de la primera Declaración Independentista de la dominación extranjera.

La iniciativa elaborada por el kirchnerista Julio Solanas (Entre Ríos) que contempla agregarle un feriado más al calendario del 2015 en conmemoración a esa fecha, recibió la negativa de la diputada Schwindt: "Lejos de este contexto histórico donde la legitimidad del reconocimiento al "Congreso del Oriente" no está en discusión, es preciso establecer que esta política de feriados conlleva el perjuicio en la formación educativa de nuestro país, ya que miles de niños no podrán asistir a los establecimientos escolares - aseveró la diputada masista- se podría destacar el hecho histórico mediante trabajo en la currícula escolar y a través del Estado Nacional mediante publicaciones en diferentes medios y de diverso modo, sin necesidad de feriado nacional".

El dictamen de minoría presentado por la Diputada Schwindt, reconoce la conmemoración de la fecha pero no admite que se establezca un feriado mas al calendario. De este modo, dijo que "nadie mide el costo que representa un feriado en los sectores productivos, los sectores más damnificados son aquellos que se ganan la vida en forma independiente y necesitan facturar, pero no pueden hacerlo durante los feriados, los que tienen empleados y deben pagar sueldos por días en los que éstos no producen, ya que se le está incrementando el costo laboral a todos los sectores productivos y sólo unos pocos de ellos pueden sacar beneficio. Esto lo afirmo, pensando también en ciudades que no son atracción turística y por lo tanto no son beneficiadas con el movimiento turístico de fines de semana largos".

"Las empresas deben pagar horas extras -con el consecuente aumento de costos- o frenar su producción, aunque muchas veces esta opción no es posible", agregó.

La diputada ofreció datos como que los sectores más perjudicados son aquellos cuya actividad se reduce drásticamente como la construcción ($ 517 millones), los bancos y los servicios personales y domésticos. La suma de la pérdida en los tres sectores, descontando el impacto indirecto del aumento del turismo sobre los mismos, asciende a $1.541 millones.

" En el sector manufacturero se da la mayor merma ($ 1.442 millones), principalmente por su importante peso relativo en el PIB (14%). Existen procesos de producción que no pueden detenerse(ej. aceros),lo que genera sólo un aumento de costos. Otros sectores por miedo a no poder satisfacer la demanda y perder su participación en el mercado buscan seguir produciendo hasta lo que su estructura de costos lo permite".

El comercio mayorista y minorista es uno de los menos perjudicados: su pérdida llega a $ 977 millones. "Los días de ocio son una buena excusa para salir de compras en familia o para aprovechar y hacer las compras de la semana. En consecuencia también aumenta el consumo en hoteles y restaurants, el único sector que no muestra pérdidas durante los feriados sino por el contrario aumenta su actividad ($ 99 millones)".