De acuerdo a los controles de inspectores del Ministerio de Trabajo bonaerense en terminales de media y larga distancia, uno de cada cuatro ómnibus presentó algún tipo de infracción. De las 516 inspecciones, se detectaron 136 infracciones y 7 suspensiones de tareas, tras las cuales las empresas debieron, sin excepción, reemplazar al conductor de las unidades para poder continuar con los viajes.

La ciudad con mayor índice de transgresión fue Tandil, con 88 inspecciones, 29 verificaciones, 59 infracciones (67 por ciento) y tres suspensiones. Le siguió Olavarría con 30 inspecciones, 15 verificaciones, 15 infracciones (50 por ciento) y una suspensión, y luego Villa Gesell con 80 inspecciones, 44 verificaciones, 36 infracciones (45 por ciento) y dos suspensiones.

Mientras que en el Parido de la Costa se detectó un 10 por ciento de infracciones, en Tigre 9,1, en La Plata 9 y en Mar del Plata 6,7 por ciento.

"Durante estos procedimientos verificamos el vínculo legal existente entre los trabajadores y las empresas, el cumplimiento de la jornada de trabajo y el acatamiento de las horas de descanso. Estos operativos se realizan durante todo el año, pero revisten mayor importancia durante los fines de semana largo o en vacaciones, debido a que en esos períodos se produce un importante flujo turístico", explicó el subsecretario de Trabajo, Carlos Molina.

Y destacó que "la suspensión de tareas por exceso de jornada o falta de descanso es menor al 2 por ciento lo que implica que, si bien queda mucho por hacer, estamos yendo por el camino correcto".