Gestión hidráulica en Olavarría: Propuestas de José Luis Arguiñena
El ex concejal Arguiñena ha respondido a los comentarios de Galli y ha presentado propuestas concretas para abordar de manera urgente la situación hidráulica en la ciudad.
El arquitecto y ex concejal José Luis Arguiñena ha participado en el debate sobre la política hidráulica de Olavarría tras los recientes temporales. Ha cuestionado los comentarios del concejal Hilario Galli y ha resaltado las declaraciones del Ingeniero Orfel Fariña, secretario de Obras Públicas del Municipio.
Arguiñena mencionó que las infraestructuras hídricas en Olavarría no están a la altura del tamaño actual de la ciudad, debido a la falta de un desarrollo planificado en la expansión urbana. Señaló que la capacidad de desagüe no ha sido adecuadamente adaptada al crecimiento demográfico, lo que pone en evidencia la necesidad de mejorar la infraestructura existente para garantizar una adecuada respuesta del sistema hídrico en la ciudad.
El ex concejal también hizo mención a discusiones anteriores sobre la gestión del ex intendente José Eseverri y resaltó la importancia de un enfoque completo en la administración hidráulica, que abarque la limpieza regular de canales y sumideros.
Arguiñena expresó su reconocimiento hacia Fariña y, a pesar de no identificarse como peronista, valoró la relevancia de sus opiniones al respaldar sus puntos de vista anteriores sobre la situación hidráulica en la ciudad.
Arguiñena respondió a las críticas de Hilario Galli calificándolas de "mentira", y destacó que durante su período como concejal había debatido y señalado las deficiencias en la gestión hidráulica. Asimismo, resaltó la importancia de abordar el desarrollo urbano de manera integral, proponiendo la realización urgente de un estudio urbano dirigido por especialistas para planificar adecuadamente la infraestructura de la ciudad.
Arguiñena hizo hincapié en la importancia de considerar el cambio climático al adaptar la infraestructura urbana a las nuevas condiciones climáticas. Destacó la necesidad de mantener la continuidad en la planificación y ejecución de proyectos de infraestructura, sin importar los cambios políticos.