Ratifican al aire como la principal vía de contagio
Los aerosoles son partículas que están suspendidas en el aire y al respirar, hablar, cantar, toser o estornudar, las gotitas respiratorias emitidas se mezclan en el aire circundante y forman un aerosol
"Es mucho más probable que las personas se infecten en una habitación con ventanas que no se pueden abrir o sin ningún sistema de ventilación", subrayaron.
Para los expertos es importante saber, que si una persona puede inhalar partículas, independientemente de su tamaño, está respirando aerosoles y aunque esto puede ocurrir a larga distancia, es más probable que ocurra cuando se está cerca de alguien.
"Los aerosoles entre dos personas están mucho más concentrados a corta distancia, de forma similar a cuando se está cerca de alguien que fuma. Las personas infectadas con coronavirus producen muchas pequeñas partículas respiratorias llenas de virus al exhalar", dice el estudio.
Según los expertos, algunas de ellas serán inhaladas casi inmediatamente por las personas que se encuentren a una distancia típica de conversación "de corto alcance" de menos de un metro, mientras que las restantes se dispersarán a distancias más largas para ser inhaladas por otras personas alejadas a más de dos metros.
También recomendaron que para garantizar la sustitución o limpieza del aire, además de abrir las ventanas, es conveniente instalar o mejorar la ventilación y el sistemas de aire acondicionado.
También hicieron hincapié en el uso de barbijos o tapabocas de buena calidad para obtener una protección eficaz contra los aerosoles inhalados.
"Las mascarillas suelen impedir que las gotas grandes caigan en las zonas cubiertas de la cara, pero las partículas diminutas del aire pueden encontrar su camino por cualquier hueco. Para eso se necesita usar barbijos de buena calidad con una gran eficacia de filtración y un buen ajuste", alertaron.
Según concluyeron los expertos, es muy posible que el coronavirus se convierta en algo estacional y tendremos que convivir con él como lo hacemos con la gripe.
"Se necesitan entornos interiores más seguros, no sólo para proteger a las personas no vacunadas y a aquellas a las que les fallan las vacunas, sino también para disuadir a las variantes resistentes a las vacunas o a las nuevas amenazas que pueden aparecer en cualquier momento", agregaron. (Télam)