Daniel Lovano

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La tregua entre la Asociación Obrera Minera Argentina (AOMA) y la Asociación de Fabricantes de Cemento Portland, impuesta por el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, consumió cinco de los primeros 15 días hábiles que define la legislación sin que se produjeran acercamientos entre las partes en pugna.

Esta conciliación obligatoria ordenada por la cartera laboral salió al cruce del espiral de protesta diseñado por el sindicato que preside a nivel nacional el sierrabayense Héctor Laplace, en reclamo de mejoras salariales.

El primer paso fue el "estado de alerta" y "quite de colaboración" en todas las cementeras del país dispuesto el 4 de marzo.

Entre los argumentos, AOMA recordaba que "el día 31 de enero del corriente año se vencieron las pautas salariales de ambos convenios, por lo cual a mediados de febrero se iniciaron negociaciones con la Asociación Fabricantes de Cemento Portland y aún no se llegó a acuerdos satisfactorios para nuestra Asociación".

También denunciaba que Loma Negra, y por afuera de la mesa paritaria, había procedido de manera unilateral a ofertar adelantos de un 15% a su personal. "En una abierta violación a la seriedad y responsabilidad que debe primar en toda negociación" sostenía el gremio.

Sin respuestas de parte de la patronal, AOMA llevó la protesta a "paros sorpresivos de 2 horas por turno y por sector de trabajo a partir de la 0 hora del día viernes 11" y al mismo tiempo anticipaba para el "lunes 14 de marzo un paro total de actividades en todas las plantas de cemento del país".

Antes de hacerse efectiva la medida más dura, el mismo 11 de marzo en horas de la noche el Ministerio de Trabajo se involucró en el conflicto, dispuso la conciliación obligatoria y citó a las partes para el martes último en las oficinas de la cartera.

Si bien la puja es entre el gremio y la patronal del cemento que agrupa a las tres grandes operadoras del país (Holcim, Cementos Avellaneda y Loma Negra), la disputa más fuerte de AOMA es con la multinacional brasileña propietaria de Loma Negra, que también salió a los medios a dar su versión del asunto.

Con la conciliación obligatoria en vigor, el comunicado de la firma aseguraba que "la Asociación Obrera Minera Argentina ha incumplido la conciliación obligatoria dictada el viernes (11/3) por el Ministerio de Trabajo de la Nación" ya que "las medidas de fuerza no contaron con la aprobación de todo el personal, sino que se trató de una imposición de AOMA a través de las circulares enviadas a las distintas seccionales".

Al mismo tiempo informaba la presentación de "una denuncia penal ante reiterados cortes dentro sus plantas, incumpliendo la conciliación obligatoria, y por interrumpir la libertad de trabajar e invasión de la propiedad privada por parte de representantes sindicales".

Al día de hoy el conflicto se encuentra en stand by, y a la espera de lo que suceda en la próxima reunión de partes, a celebrarse este lunes en la sede del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

El titular de AOMA, Héctor Laplace, se refirió ayer al curso del conflicto durante el alto en un congreso en la ciudad de Córdoba. "No hubo ningún tipo de avance en la reunión que mantuvimos las partes el martes pasado en el Ministerio de Trabajo, pero estamos dentro de la conciliación obligatoria y ahora está prevista una reunión en el mismo Ministerio el próximo lunes a las 11 de la mañana" marcó el dirigente gremial.

La posición de las partes en la instancia mediadora se mantuvieron irreductibles en la primera cita, reveló: "Cada uno fue con su postura y defendió sus intereses". 

"AOMA pide una mejora en la cuestión salarial, que de acuerdo al sector empleador con el ofrecimiento que hicieron las expectativas deberían estar cubiertas" añadió.

"Por supuesto que nosotros les respondimos que no. El representante del Ministerio de Trabajo nos volvió a preguntar cuál era el pedido de la organización en materia salarial, nosotros le hicimos llegar nuestra propuesta, a la cual la Asociación de Fabricantes de Cemento Portland dijo que deberán evaluarla" comentó.

Laplace confesó que "el próximo lunes nos vamos a enterar de cuál es el nuevo ofrecimiento, si es que lo hay, y se verá cómo se sigue. Pero, las posturas no han variado".

"De todas maneras, nosotros fuimos muy claros en la reunión que mantuvimos el martes pasado, en el sentido de que ratificamos cómo se puede resolver esto y cuáles son los porcentajes que estamos pidiendo para el semestre, porque intentamos una negociación semestral en virtud de la inflación que estamos teniendo en el país" señaló.

"Supongo que en esta cuestión nos vamos a poner de acuerdo -especuló-, y que vamos a abarcar los seis meses que van del 1 de febrero al 31 de julio, pero en los porcentajes es donde aparecen las grandes diferencias".

Laplace confesó que en la mesa de negociaciones AOMA mostró su molestia por la estrategia de la firma Loma Negra, que por afuera de la ronda paritaria ofreció un 15% de incremento salarial a cuenta de futuros aumentos. "Por supuesto que lo planteamos. AOMA no se calla nada en la mesa de negociaciones, y menos ante la autoridad administrativa del Ministerio de Trabajo, porque cuando lo decimos públicamente es porque también lo decimos en privado" afirmó.

"El reproche se ha hecho, y con todas las letras. Para nosotros fue una actitud, sin ninguna duda, por afuera de los parámetros correspondientes dentro de una negociación responsable. ¿Cuál fue la respuesta de Loma Negra? Lo que ellos comentaron es que había gente que solicitó un adelanto y que tenían la conformidad del sindicato" indicó.

Laplace desmintió la explicación empresarial: "A mí Loma Negra me preguntó alguna vez, y yo le dije que si tenían trabajadores con algún problema económico debían atenderlos. Pero una cosa es ir a atender un problema puntual y otra cosa es ir a ofertar en todas las plantas del país un 15% de aumento".

"Creo que hay una distancia terrible entre una cuestión y la otra. Cada uno argumentó que había reaccionado de la mejor manera, pero nosotros no estamos para nada de acuerdo con la actitud de esa empresa. Además, recordamos que recurrió a esta maniobra por segundo año consecutivo" enfatizó.

Si bien este lunes será el segundo encuentro de partes en la sede del Ministerio, de mantenerse la distancia entre ambas posturas no habría que esperar un recrudecimiento del conflicto. "Estamos dentro de un período de conciliación que son 15 días hábiles, con la posibilidad de ampliarlo 5 días más, facultad que le pertenece al Ministerio de Trabajo. Con lo cual estamos bastante lejos de que se cumpla ese tiempo. Así que diría que aún no hay posibilidad de que se rompa el diálogo y de que el Ministerio dé libertad de acción a las partes" observó Laplace.

Pero, advirtió, que "si no se llega a un acuerdo no hay ninguna duda de que vamos a volver a las medidas de acción directa".