Una solución espacial para la crisis capitalista
¿El capitalismo siempre se reinventa? Nanotecnología, ambientalismo y viajes espaciales para salvarlo.
Hacia fines de la Edad Media, la sociedad europea empezaba a entrar en una crisis estructural. La población comenzaba a crecer sostenidamente y la base de la economía feudal era la tierra, un recurso muy inelástico.
Conscientes o no, la clase dominante (reyes y nobles) empezaron a pujar sus fronteras. Para ello necesitaban Estados cada vez más organizados y unificados. Pero por más que empujaran, la tierra conquistada o perdida seguía siendo la misma en Europa. Así que con mucho entusiasmo se sumaron a las invitaciones de los Papas a reconquistar Jerusalén, la Tierra Santa que vendría a saldar el déficit de tierras.
Las campañas contra los sarracenos fracasaron estrepitosamente, pero la expansión ya estaba en marcha. A principios de 1400 los portugueses encabezaban la carrera de ultramar, circunvalando África y alcanzando India. Y serían los castellanos los que coronarían la carrera y saldarían la crisis de tierras, encontrándose con América en el camino a Catay (China) y Cipango (Japón).
Parecido a aquella crisis del Mediterráneo, el capitalismo del Atlántico Norte del siglo XXI también entró en un proceso de estancamiento. El primer síntoma fue la salida del patrón oro por EE.UU. en 1971. Se emite dinero sin impedimentos para seguir estimulando una economía que ya empezaba a mostrar signos de agotamiento. El último signo fue la quiebra de las hipotecas subprime, iniciada en Europa en 2007.
Las clases dominantes actuales también están viendo la crisis y pensando una salida. Donald Trump propuso una fórmula del siglo XX: proteccionismo, chauvinismo, decisionismo. Outsider del sistema político, fue un empresario que se transformó en político al fin. Que Estados Unidos mire hacia dentro de sus fronteras. Pero el COVID se llevó puesta la reelección de Trump. Y si quedaban dudas, nada asustó más a la burguesía planetaria que la muchachada que intentó tomar el Capitolio.
El otro lado del espejo: Elon Musk
En enero de 2021, Musk alcanzó un patrimonio de 189.700 millones de dólares y se convirtió en la persona más rica del mundo. Es casi un tercio de la producción total de bienes y servicios de la Argentina durante un año.
¿Cómo hizo? Físico y economista, se radicó en Silicon Valley para trabajar en capacitores electrolíticos destinados a vehículos eléctricos. Musk se destacó por ser un programador informático precoz. Allí definió las tres grandes áreas estratégicas: Internet, Energías Renovables y Ambiente, y Espacio.
Entre los "problemas importantes" estaba el manejo de fondos por internet. Así cofundó X.com. Por alguna razón, Musk tiende a poner la letra X en sus emprendimientos. En junio de 2001 cambió el nombre por PayPal. Sustentada por fondos de riesgo, PayPal tuvo un crecimiento sideral y en octubre de 2002 fue vendida por US$ 180 millones. Con US$ 100 millones fundó SpaceX, con US$ 70 millones Tesla Inc y con US$ 10 millones SolarCity.
SpaceX es una empresa de fabricación y transporte espacial, cuyo objetivo es reducir los costes de los viajes espaciales, convertirse en la primera transportadora espacial y promover la colonización de Marte. Esta empresa vino a irrumpir en un aspecto que hasta ahora había sido exclusiva potestad de los Estados, la carrera espacial. En 2015, SpaceX anunció que entraría en el negocio de producción de satélites y el de internet satelitarl. Así nació Startlink. En 2019 lanzó el primer tándem de 60 satélites. La empresa es ampliamente financiada por la Fuerza Aérea y el Departamento de Defensa de Estados Unidos. Por ello, Musk se define políticamente a mitad de camino entre demócratas y republicanos.
SolarCity Corporation es una empresa especializada en sistemas fotovoltaicos y energía solar y de conversión hacia el uso sustentable de la energía. Aunque no explicitado, es la compañía que debiera conducir al reemplazo de las baterías de litio porque la luz solar es inagotable.
La joya de la Corona
Pero la empresa insignia de Musk es Tesla. Recientemente se dispararon las acciones y lo convirtió en el hombre más rico del mundo. Diseña y comercializa vehículos eléctricos, tanto como las componentes de los mismos, y muy en particular baterías de iones de litio.
Tesla utiliza motores tipo Tesla (el motor eléctrico de fases, inventado por el científico serbocroata homónimo). Pero las 10 patentes desarrolladas por la compañía en cuanto a sistemas y motores eléctricos, la ponen en la vanguardia del recambio energético hacia el final de la era del petróleo.
Considerando lo que cuesta que un auto eléctrico gane potencia hace imposible que esta energía sea usada para aviones. En este sentido, las investigaciones de SpaceX pueden estar más ligadas a transportar personas de Nueva York a París que a colonizar Marte. La cohetería utiliza combustibles alternativos no eléctricos.
También hay que destacar el alto grado de informatización de los autos Tesla. Algunos de los prototipos ya se autoconducen. Esto requiere sistemas complejos de acceso a la información en tiempo real, grandes avances en inteligencia artificial y sistemas algorítmicos de toma de decisión. Esto bajo la axiomática que toda condición humana puede ser reemplazable por una tecnología de error controlable, es decir, sistemas informáticos de control.
Lithium time!
En química-física, la investigación básica en baterías de litio disputa el podio con las nanociencias / nanotecnologías. En 2019 fueron galardonados con el Premio Nobel de Química John B. Goodenough (Universidad de Texas, USA), M. Stanley Whittingham (Universidad de New York, USA) y Akira Yoshino (Universidad de Nagoya, Japón), a quienes se les atribuye ser los creadores de tal tecnociencia. Esto marca la importancia dentro del esquema académico que tiene el mundo económico.
Tesla fabricó baterías de litio con autonomía de más de 300 km, triplicando a sus competidores. El desafío que tienen por delante es la disminución en el tiempo de recarga. Se toma dimensión comparando con lo que cuesta recargar apenas un celular, mientras que un celular puede cargarse mientras se usa, y un automóvil obviamente no.
En Nevada se encuentra la fábrica de baterías de litio de Tesla que produce más baterías que la suma total del resto del mundo. Bolivia tiene uno de los principales yacimientos del planeta y por eso Musk apoyó el golpe de Estado contra Evo Morales, advirtiéndole mediante Twitter que "Derrocaremos a quién querramos. Supéralo".
Como resultado, se está generando una concentración monopólica sin precedentes: red informática global, prestación de internet satelital, conducción algorítmica, eficiencia energética, inteligencia artificial, nanotecnología y energías renovables. Por todas estas razones, Musk es la esperanza de la burguesía planetaria en un capitalismo decadente. Y por eso también Hollywood lo festeja y lo convierte en un Iron Man real.
(*) Investigador del CONICET, en el Área Química (Química-Física). Coordinador de la sección Ciencia y Tecnología de la AGENCIA PACO URONDO.
(**) Licenciado en Comunicación Social. Docente. Director AGENCIA PACO URONDO.