El Campo se Opone Firmemente al Aumento de Impuestos en Buenos Aires
Los productores agrarios de la Mesa Agropecuaria Bonaerense expresan su descontento ante el aumento del impuesto inmobiliario aprobado en la Ley Impositiva 2024 de la provincia de Buenos Aires. Consideran que este incremento es un golpe significativo para el sector y critican la sobredimensión de gastos en la provincia.
El presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), Horacio Salaverri, ha expresado su fuerte crítica al aumento del impuesto Inmobiliario aprobado recientemente en la provincia de Buenos Aires como parte de la Ley Impositiva 2024. Salaverri considera que este aumento es un "balde de agua fría" para el sector agrario y argumenta que se debe a la sobredimensión de gastos en la provincia.
En una entrevista con Radio Continental, Salaverri mencionó que el proyecto comenzó con un aumento del 300% en el impuesto inmobiliario, pero tras negociaciones, se logró reducir al 200%. Sin embargo, señaló que la ley incluye componentes adicionales y que las cuotas serán actualizadas mediante un coeficiente desconocido.
El presidente de Carbap argumenta que la provincia y los municipios se encuentran sobredimensionados en gastos y que, ante la falta de fondos discrecionales, han recurrido a leyes impositivas para obtener recursos adicionales.
Esta crítica se suma a la de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), que había expresado su "repudio absoluto" al proyecto de aumento impositivo, considerándolo un golpe duro para los productores y la producción nacional.
El impuesto inmobiliario actualizado establece topes progresivos de crecimiento en comparación con el año anterior, con un límite máximo de aumento del 200% para el año 2024 en lugar del 300% originalmente propuesto. Sin embargo, se planea agregar una cuota extra del impuesto para compensar la reducción del tope.
Salaverri concluyó afirmando que, aunque comprende la necesidad de equilibrar las finanzas, los aumentos de impuestos no deben recaer de manera abrupta en el productor agrario, especialmente después de un período de sequía que ha dejado al sector debilitado.
El debate sobre los impuestos en el sector agrario continúa siendo un tema importante en Argentina, donde los productores buscan un equilibrio entre las necesidades fiscales del país y la sostenibilidad de sus operaciones.