Modifican resolución de agroquímicos y suspenden vigencia por un año
Desde su publicación el pasado diciembre, la resolución 246 de Agroindustria había cosechado rechazos de distintos sectores que consideraron que se trataba de una medida de carácter general y sin parámetros concretos para limitar la aplicación de fitosanitarios.
Con fuertes críticas, unas 300 organizaciones sociales, educativas y de derechos humanos emitieron a mediados de enero un duro comunicado para oponerse a la norma y señalaron que "debilita el ya débil control del Estado, al delegar en los ingenieros agrónomos contratados por las empresas y los privados que requieren la aplicación de agrotóxicos, la decisión de con qué y cómo fumigar".
En ese marco, uno de los artículos más criticados de la resolución fue el 5°, donde el Gobierno limitaba el uso de agroquímicos en zonas de escuelas solo en horario de clases. "El único límite a la aplicación de agrotóxicos de acuerdo a la resolución 246-MAGP-18 es el horario escolar", advirtieron las ONG, que calificaron la norma como "regresiva".
Tras esas observaciones, ahora el Ejecutivo provincial decidió modificar el artículo 5°, aunque sigue sin establecer distancias concretas. Los cambios fueron oficializados hoy en el Boletín Oficial a través de una resolución complementaria que lleva la firma del ministro de Agroindustria, Leonardo Sarquís.
En el nuevo escrito, la administración bonaerense llama a los productores a "abstenerse en forma total de realizar aplicaciones y pulverizaciones de fitosanitarios, en los lotes que linden con establecimientos educativos, campos de bombeo o baterías de pozos para el abastecimiento público, cuerpos y cursos de agua emplazados en el área rural".
De cualquier manera, deja una posibilidad abierta para fumigar en esos sectores "por alguna razón estrictamente justificada", aunque advierte que debe ser "fuera y lejos de los horarios de clases" y de "otras actividades", y "sin presencia alguna de personas o animales"
"El objetivo es fortalecer aún más las acciones orientadas a un mayor control de las aplicaciones y así profundizar el cuidado de la salud de la población, proteger los recursos naturales y el medio ambiente, teniendo en cuenta la seguridad agroalimentaria y las necesidades de los productores", le señalaron a DIB desde el Ministerio de Agroindustria.
Por un año
El otro punto importante de la nueva resolución publicada hoy es el que determina la suspensión de la vigencia por un año de las mismas pautas dictadas por Agroindustria para "poder trabajar -durante este tiempo- en forma precisa, eficiente y detallada, y a su vez optimizar las condiciones de operatividad con los Municipios suscriptores del convenio".
Para la labor previa a la implementación, el Gobierno también resolvió crear "un equipo de trabajo técnico multidisciplinario e interinstitucional con el objeto de elaborar un protocolo específico de aplicación" para zonas de amortiguamiento. Estos sectores son los lotes contiguos a áreas urbanas, las zonas residenciales extraurbanas y áreas de población dispersa; los márgenes de cursos de agua o cuerpos de agua y zonas de bombeo; los establecimientos educativos; las áreas de esparcimiento; y las reservas naturales.
Ya se sumaron
Según detalló el Gobierno bonaerense, un total de 41 municipios ya "celebraron convenios" con Agroindustria para "poder ejercer el control de las aplicaciones en las zonas de amortiguamiento", mientras que "muchos más" mostraron "predisposición" para sumarse.
"Advertimos la necesidad de optimizar el trabajo con los municipios que firmaron la adhesión y estamos recibiendo pedido del resto de los municipios que se quieren sumar", le contaron a esta agencia desde la cartera que conduce Sarquís. Y agregaron que ahora se busca generar un registro amplio de ingenieros agrónomos y un protocolo de aplicación para las zonas sensibles, especialmente las cercanas a escuelas.
Vale señalar que el uso de agroquímicos es un tema que preocupa en el interior bonaerense. De hecho, más de setenta distritos ya han avanzado con normativas locales para regular su uso. En muchas comunas las medidas dictadas son más exigentes que las tomadas por Provincia e incluyen prohibiciones en las zonas linderas a las ciudades.
En Ramallo, hay una la ordenanza plantea que las fumigaciones terrestres se realicen 300 metros después de los límites urbanos, mientras que está prohibida de manera aérea en todo el distrito. En Areco y Saavedra las distancias rondan entre los 100 y 150 metros por tierra, respectivamente, y los dos kilómetros con aviones. En tanto, en Ayacucho la distancia para "mosquitos" es de 500 metros, al igual que en Saladillo. En este último distrito existe además una protección de 100 metros para las escuelas rurales.