El secuestro involucró a dos jóvenes. Ocurrió en la vecina ciudad de Azul y durante tres días, una chica fue víctima de su ex pareja, un adolescente de 17 años que fue alojado en el Instituto Leopoldo Lugones de aquella ciudad.

La joven de 18 años, estudiante y ex pareja de este chico de 17 años, fue víctima de secuestro. Durante tres días el joven la mantuvo cautiva en una vivienda ubicada en calle Sarmiento y las vías de aquella ciudad.

Lo cierto es que a raíz de un llamado al 911 -donde se denunció que se escuchaban detonaciones de arma de fuego en el lugar y que una persona habría sido herida con un arma blanca-, efectivos policiales se presentan y al entablar diálogo, el joven respondió con evasivas, e incluso cuando le preguntaron por su novia dijo "se cayó a un pozo ciego".

Mientras que un grupo de policías inspeccionaba el lugar y buscaba el pozo ciego, escucharon los gritos y pedidos de auxilio de la joven que provenían desde el interior de la casa.

En resumen, ya con el magistrado interviniente informado de la situación y con los efectivos que lograron ingresar a la vivienda y reducir al joven que se resistía, encuentran a la chica en estado de shock.

Se constata que efectivamente presentaba heridas de un arma blanca y sangrantes. Cuando relató los hechos, contó que desde el sábado el joven la mantenía cautiva.

En el lugar se secuestró una escopeta de fabricación casera, un facón y un teléfono celular.

Tras ser revisada por los médicos, se constató que eran leves las heridas padecidas por la joven y como así también las heridas de los efectivos policiales que fueron agredidos por el joven.

El adolescente finalmente fue trasladado y fue alojado en el Instituto Leopoldo Lugones. Tenía prohibición de acercamiento del juzgado de Familia Nº 1 de Azul, y contacto vigente para con víctima.