El ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, se ausentó temporalmente de sus funciones desde el jueves 16 hasta el lunes 20 de enero, argumentando “motivos personales”. Durante este periodo, el presidente Luis Arce designó al ministro de Defensa, Edmundo Novillo, como autoridad interina mediante el Decreto Presidencial 5315, publicado en la Gaceta Oficial de Bolivia.

La designación se realizó en cumplimiento del Artículo 118 del Decreto Supremo N° 4857, luego de que Del Castillo comunicara formalmente su ausencia y solicitara la asignación de un ministro interino.

La salida temporal de Del Castillo coincide con un momento de relevancia política y judicial, marcado por la declaración en rebeldía del expresidente Evo Morales, acusado de trata y tráfico de personas con agravantes. Este viernes, el juez Nelson Alberto Rocabado, de Tarija, dispuso varias medidas en contra del exmandatario, incluyendo su arraigo nacional, la publicación de un edicto con sus datos personales, el mandamiento de aprehensión y la anotación de bienes sujetos a registro.

La gestión interina de Novillo se da en un contexto de alta sensibilidad política y judicial, con las miradas puestas en el seguimiento de este caso emblemático que ha generado amplio debate en el ámbito nacional.