La ciudad de La Paz amaneció envuelta en una densa humareda, resultado de los incendios que afectan diversas regiones del país. Según un reciente reporte de la Secretaría Municipal de Medio Ambiente, la calidad del aire ha sido catalogada como "muy mala", lo que representa un riesgo significativo para la salud pública.

Ante la crítica situación, el presidente Luis Arce decretó emergencia nacional con el fin de reforzar las acciones para combatir los incendios. Sin embargo, parlamentarios de la oposición y activistas en defensa del medio ambiente consideran que esta medida no es suficiente. En múltiples declaraciones, han solicitado la declaración de "desastre nacional" y la abrogación de leyes que, según ellos, favorecen la quema y destrucción de bosques, conocidas como "leyes incendiarias".

La situación continúa agravándose y la demanda por una respuesta más contundente del gobierno sigue creciendo.