La ciudad de Oruro se encuentra en medio de una crisis de transporte provocada por la escasez de diésel, lo que ha resultado en el bloqueo de vehículos en varias zonas clave. Desde el inicio de esta situación, que comenzó hace varios días, los conductores de transporte público y de carga se han visto obligados a detener sus unidades debido a la imposibilidad de abastecerse del combustible necesario.

El desabastecimiento de diésel ha llevado a un aumento significativo en el tiempo de espera para los ciudadanos, así como a una interrupción de los servicios de transporte y la distribución de mercancías. 

La falta de diésel ha generado preocupaciones sobre el impacto en la economía local y la calidad de vida de los residentes.