El Defensor del Pueblo, Pedro Callisaya, informó este martes que durante los enfrentamientos ocurridos ayer entre seguidores del presidente Luis Arce y la facción liderada por Evo Morales, se reportaron tres personas heridas y una detenida. Los conflictos se desarrollaron en inmediaciones de la avenida final Montes, en el centro de La Paz, durante la llegada de la “Marcha para Salvar Bolivia”, encabezada por el sector evista del Movimiento al Socialismo (MAS).

“Debemos lamentar al finalizar la jornada la existencia de varios incidentes que se han suscitado en inmediaciones de la avenida final Montes donde se ha reportado la existencia de por lo menos tres heridos”, indicó Callisaya en conferencia de prensa.

Según la información proporcionada, dos de los heridos fueron trasladados al centro de emergencias Auxilio 167, ubicado en la avenida Simón Bolívar, mientras que el tercero fue llevado al Hospital La Paz, en la Garita de Lima. Hasta el momento, no se han brindado detalles sobre el estado de salud de los pacientes.

Además, Callisaya confirmó la detención de una persona, oriunda de Oruro, que fue trasladada a las celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC). “Aparentemente tendría alguna situación contraria al orden que ha motivado la detención por parte de efectivos policiales”, explicó el Defensor.

Durante los enfrentamientos, se denunció el uso de gas lacrimógeno en la terminal de buses de La Paz, ubicada cerca del mitin que realizaba la facción evista del MAS. El uso de los agentes químicos generó momentos de caos entre los viajeros presentes en la terminal, según detalló Callisaya. Además, se identificaron grupos armados con cascos, escudos artesanales y petardos, que se enfrentaron a los marchistas.

El Defensor del Pueblo también expresó su preocupación por los incidentes que obstaculizaron la labor periodística de algunos medios de comunicación que cubrían los hechos. Ante la violencia registrada, Callisaya reafirmó el compromiso de la Defensoría para seguir mediando entre ambas facciones en busca de un diálogo que permita superar el conflicto.

“Se están extremando esfuerzos para lograr acercar a las partes y generar un espacio de diálogo”, aseguró Callisaya, quien destacó que ambas facciones han manifestado su disposición para participar en una negociación. Sin embargo, la facción evista ha condicionado su participación a una reunión previa entre el Defensor del Pueblo y el Gobierno, mientras que el Ejecutivo solicitó que Evo Morales no imponga condiciones para el diálogo.

Los enfrentamientos ocurrieron en el marco de la marcha que comenzó el 17 de septiembre en Caracollo y que arribó este lunes a La Paz. Entre las demandas de los marchistas destacan la solución a la escasez de diésel y dólares, así como la habilitación de Evo Morales para una futura candidatura. En un mitin realizado el lunes por la tarde, Morales presentó cuatro exigencias al presidente Arce: la remoción de ministros implicados en casos de narcotráfico y corrupción, la aprobación de la ley para la construcción de la carretera Confital-Bombeo, la implementación de un plan de austeridad, y la resolución del desabastecimiento de combustible.

Por su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores denunció anoche ante la comunidad internacional que el ultimátum lanzado por Evo Morales busca interrumpir el orden democrático en Bolivia.