BELO HORIZONTE / Daniel Lovano, enviado especial de EL POPULAR Medios

Salir dos horas antes de un Bélgica - Argelia no parecía un mal programa en una ciudad futbolera como Belo Horizonte y para un estadio majestuoso como el Mineirao, tratándose de un partido sin mucha historia. Pero la primera luz de alerta fue en la parada del Metrobus, en nuestro barrio, cuando aparecien dos jovencitos (Joao y Marilia) jugando entre sus dedos con las entradas para el partido.

La advertencia se concretó al llegar a la estación ubicada a unos 100 metros del cruce de las avenidas Antonio Carlos y Antonio Abraham Caram; a unas seis o siete cuadras del Mineirao. Una asombrosa marea humana con el predominante color amarillo de la "seleçao brasileira", pero también cada tanto el blanco con verde de los argelinos y algún que otro colorado de Bélgica.

Claro, en medio de semejante babel no cuesta demasiado identificar el castellano, y el "argentino" de Buenos Aires y adyacencias menos.

"Ustedes son argentinos; nosotros también. Venimos al Mundial con una misión política; somos de Movimiento Evita, del Chino Navarro, que va a ser el vicepresidente de Daniel Scioli a partir de 2015" dijo uno de ellos.

A regañadientes aceptó decir que se llama Juan Fernández (ni él se lo creyó), que integra la hinchada de Boca, pero no más. "Si soy barrabrava o no es algo que no te puedo decir" mencionó.

Otras cosas si las dijo; como que forma parte de un grupo de 300 hinchas que tienen entradas para 30 partidos del Mundial y que en autos van a recorrer Brasil con su movida "política".

Otro episodio que salta a la vista sobre algunas cuestiones muy debatidas allá en el Sur del continente, horas después de que se supiera que la Asociación del Fútbol Argentino fletó tres aviones charters el domingo ocupado por dirigentes.

Nno los más relevantes, no los que ocupan sectores estratégicos en la AFA o en sus verientes. Todos, a razón de tres, cuatro, cinco o seis de los clubes afiliados, ya sean de Primera, B Nacional, Primera B, C y D.

En fin...