Fotos: Claudio Martínez

La moneda se bamboleaba, podía caer para cualquier lado, y terminó cediendo para el lado de Maximiliano Estévez que, en una actitud repudiada por todo el publico, hizo gala de su mayor experiencia, sacó a Agustín Torre del partido en el undécimo game del tercer set, después mantuvo su servicio y terminó ganando este partido por los octavos de final del Future Ciudad de Olavarría, que se juega en el Campo de Deportes "La Pedrera", por 4-6, 6-3 y 7-5 al cabo de 3h y 2m de una épica batalla tenística.

Un set para cada uno, cinco iguales, clara ventaja física para el jugador olavarriense; Estévez con claros síntomas de agotamiento hizo lo que nadie había intentado en lo que va del campeonato: se tomó todo el tiempo del mundo para recoger una pelota que estaba pegada a los carteles publicitarios y, cuando Torre se disponía a sacar, pidió retirar otra que descansaba debajo de la red, del lado de olavarriense.

"Sacala que me molesta" pidió y para Torre mentalmente se terminó el partido que venía jugando. Con esas artimañas Estévez ganó minutos preciosis para sus pulmones, enardeció al público, sacó del partido a Agustín, que cometió una doble falta, un error no forzado y le entregó en bandeja.

El desenlace estaba escrito. Más cuando el chico olavarriense debió pedir asistencia médica en el último descanso para atenuar una contractura en los aductores de la pierna izquierda.

Los dos comenzaron con problemas para presionar a partir de sus servicios. A tal punto que llegaron al cuatro iguales del primer set con dos quiebres por lado (el segundo juego Agustín lo dejó escapar tras sacar 40-0). Agustín quebró para adelantarse 5-4, logró mantener su servicio en el game siguiente y se llevó el primer set.

El segundo empezó patas para arriba. Estévez quebró en el segundo juego, se fue 3-0 frente a un adversario que parecía sin respuestas. "Estoy muy cansado" respondió Torre ante la arenga de su entrenador, y este le respondió "es mejor que te canses ahora y no dentro de dos horas".

Agustín reaccionó, se puso 3-3, pero sus problemas con el servicio (hizo cuatro dobles faltas) conspiraron contra la solidez de su juego, frente a un rival que en el fondo de la cancha fue un frontón. Dos dobles faltas y un error no forzado que le permitieron a Estévez irse 5-3 y cerrar con su saque el segundo set.

En el tercero pesaban las piernas, el calor, los nervios. Primero quebró Estévez para colocarse 3-2, enseguida Agustín recuperó el servicio con un tremendo passing shot cruzado, a los pies de su rival. No se dieron tregua hasta el 5-5, cuando Estévez sacó una carta de la manga que nadie imaginaba; que no tenía nada que ver con su servicio, con su drive, con sus revés, o con su juego de red.

Cuando su lenguaje corporal entregaba las peores señales, apeló a su astucia, contó con la "ayuda" del juez de silla, sacó a Agustín Torre del partido, y se quedó con el pase a los cuartos de final del Future "Ciudad de Olavarría", que ya no tiene olavarrienses en el cuadro de singles.

Igual, nadie de los que estuvieron este miércoles en La Pradera olvidará la fenomenal actuación de Agustín Torre frente a uno de los mejores preclasificados del torneo.