Fotos: Carlos Ramírez

La intimidación empezó en la previa. Como dijo Sergio Hernández, no muchos clubes pueden presentar semejante escenario, colmado y con una puesta en escena envidiable, inclusive, para los estamentos superiores del básquetbol argentino. Después, desde que el balón fue al aire, Estudiantes entregó una producción que encendió a la gente y emocionó hasta a su propio entrenador.

El muy respetable Regatas de Concepción del Uruguay quedó reducido, sobre todo a partir del tercer cuarto, a su mínima expresión. Fue un contundente 87-55, que pudo haber sido mucho más amplio con porcentajes desde la línea algo más acordes a lo que mostró el equipo de Pisani en las otras facetas del juego.

Regatas intentó hacer lo mismo del partido anterior, forzó una presión alta, propuso la misma intensidad del miércoles, pero la paridad apenas si se mantuvo hasta el último tercio del primer cuarto, cuando el bata ganaba 15-13, con seis puntos en los casilleros de Sánchez y Pennachiotti.

En el segundo cuarto Estudiantes propuso una zona indescifrable para Regatas, contó con Leandro Mateo en un altísimo nivel, se fue a diez puntos (31-21, con poco más de cinco minutos para jugar), pero ingresó en esos baches habituales y le permitió a Regatas volver al partido.

Fueron cinco puntos de diferencia para el descanso largo (42-37). En el resto del partido Estudiantes fue una sinfónica en defensa, y en ataque encontró todo tipo de variantes para llegar al gol.

En el básquetbol, un deporte lógico y estadístico, los números suelen resumir conceptos: con seis minutos por jugar Estudiantes había metido un parcial de 12-0, y con dos minutos para entrar al último descanso 17-1.

En el último segmento la fiesta se anticipó en las tribunas, alimentadas por la misma seriedad y el mismo compromiso de siempre, sin que falten esos lujos que suelen llegar como broche de oro para una noche perfecta.

El martes a las 21 vuelven a enfrentarse en Concepción del Uruguay. Y, tal vez, la misma tierra que vio el descenso de Racing hace algunas semanas sea testigo del ascenso de Estudiantes al TNA. ç

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