Foto: Claudio Martínez

Dos veces Kimberley de Mar del Plata se interpuso camino a la final, cuando los goles de Emiliano Piecenti y el despliegue de Nico Di Bello eran de los argumentos más valiosos que mostraba El Fortín en la búsqueda del ascenso al campeonato Argentino B. Esta temporada ambos respondieron al llamado de Ferro, y cuando terminó el compromiso del otro lado de las vías se encontraron con la traba reglamentaria que les impedía formar parte de la lista.

Entonces, lo que no se puede vivir como futbolista, se siente como hincha. "Es un situación difícil verlo desde afuera; un momento inesperado para nosotros, pero nos pone bien apoyar al grupo en todo momento, y más ahora que están a sólo dos partidos desde ascender al Argentino B. Lo esperamos como hinchas y después vamos a querer estar ahí como jugadores" confesó Emiliano Piecenti.

"Se sufre muchísimo afuera. Nos hubiese gustado reglamentariamente estar habilitados para jugar después de volver de Ferro, pero el reglamento no lo permite" lamentó el goleador que jugó en las dos principales categorías del Consejo Federal como refuerzo.

Nico fue más drástico para expresar sus sentimientos: "Vivo estos partidos con desesperación. Me dan ganas de saltar el alambrado y meterme en la cancha; nunca me hubiese imaginado que desde afuera se podía producir tanta ansiedad, pero como dice Emi, si no podemos jugar, apoyar desde afuera también es bueno para nosotros".

"Yo siempre voy a estar agradecido con la gente de Ferro por la oportunidad que me dieron, pero jugar el Argentino B en el club donde uno se formó y del que es hincha debe ser incomparable" anticipó Di Bello.

El análisis externo les ofrece otra mirada de la trayectoria fortinense hasta los dos partidos con Sarmiento de Coronel Suárez. "El equipo está cada vez mejor. Vine a ver todos los partidos; el funcionamiento se ve cada vez más aceitado, así que sólo resta que ganemos acá, que ganemos allá y que logremos el ascenso que venimos buscando desde hace cuatro o cinco años" afirmó Nicó.

El Conejo opinó que los ve "en las prácticas, en los partidos y están muy bien. Esperemos que las cosas sigan. Como hincha quiero jugar el Argentino B con mi club; que se dé el ascenso y después arreglar las cositas que se deben arreglar entre un jugador y un dirigente, que seguramente se van a arreglar sin problemas".

"Vimos todos los partidos, así que si no vamos allá es una locura" prometió Di Bello; "tenenos todo el cotillón preparado para llevar a la tribuna como dos hinchas más" confió el "Conejo" Piecenti.

Desde afuera también dieron su impresión sobre cómo ven la intimidad de vestuario. "Los noto tranquilos, porque además Fatiga les da la confianza que ellos necesitan" comentó Piecenti; Nico opinó que "los chicos tienen que andar bien. Durante la semana se los vio bárbaro, y tengo mucha confianza que acá vamos a ganar y de allá nos vamos a volver con el ascenso. Para mí, el ascenso es nuestro".

Por ahora seguirán colgados del alambrado; quizás desde octubre se cuelguen, pero para alegría de los que compartirán estas finales codo a codo desde la tribuna.