Lo que quedó de la ceremonia
BELO HORIZONTE / Daniel Lovano, enviado especial de EL POPULAR Medios
Hace meses que la presentación del Mundial comenzó a vivirse en San Pablo. Primero se planeó una con una duración de casi una hora, pero finalmente se optó por una mucho más corta, siguiendo la tendencia que ya habían marcado Alemania y Sudáfrica, citas que dejaron atrás la extravagante presentación de Corea-Japón 2002.
Fue un intento por recorrer las siete maravillas del mundo, presentar las 12 sedes y exprimir al máximo el fútbol inclusivo. Todos los países jugaron en la misma cancha, pero acá nadie ganó.
Sí ganó el público con la participación de Claudia Leitte, una brasileña de 33 años, un cuerpo escultural y mucho para dar. Estuvo cerca de un minuto en soledad dentro del improvisado escenario, que se descubrió cuando la esfera pasó a ser una flor en primavera.
Jennifer Lopez, la artista que amagó con no decir presente en San Pablo, fue la siguiente en salir a escena y lo hizo junto a Pitbull para que el espectáculo sea completo.
El Arena Corinthians, que hasta ese momento se mostraba aburrido, a medio llenar y a la espera del fútbol, encontró su punto de ebullición a partir de allí. El show, que duró exactamente 25 minutos terminó luego de dos temas en uno. A una hora y diez del inicio del fútbol, los asistentes fueron sacando los plásticos y dejaron ver el césped, el verdadero protagonista del país.
(*) Presente en la ceremonia inaugural del Mundial de Brasil, realizada en la Arena Corinthians, de San Pablo.