En un esfuerzo por abordar el problema de las personas sin hogar, el gobernador Ron DeSantis ha firmado una nueva ley en Miami Beach que prohíbe dormir en aceras, parques y otros espacios públicos en Florida. La medida, que entrará en vigor el primero de octubre, busca mejorar la calidad de vida local y garantizar la seguridad de los residentes.

La ley incluye disposiciones para proporcionar más fondos para albergues y programas de tratamiento de adicciones y enfermedades mentales. Sin embargo, también establece excepciones y zonas designadas para que las personas sin hogar puedan acampar durante un máximo de un año, supervisadas por el Departamento de Niños y Familias (DCF).

Los defensores de la ley argumentan que permitir que las personas sin hogar duerman en espacios públicos afecta negativamente la calidad de vida local, dificulta la prestación de servicios y puede aumentar los riesgos de criminalidad en las calles. Sin embargo, algunos críticos señalan la necesidad de abordar las causas subyacentes de la falta de vivienda y garantizar que haya suficientes recursos y opciones disponibles para aquellos que lo necesitan.

La firma de esta ley ha generado un intenso debate sobre cómo abordar el problema de las personas sin hogar en Florida y si estas medidas son la solución adecuada. Se espera que su implementación en octubre arroje luz sobre su efectividad y sus impactos en la comunidad.