El Instituto de Meteorología de Cuba ha alertado sobre una temporada ciclónica muy activa que se avecina en los próximos meses, con la posibilidad de la formación de hasta 20 tormentas tropicales en toda la cuenca del Atlántico Norte, de las cuales 11 podrían llegar a la categoría de huracán.

Según el informe, se estima que 14 de estos ciclones tropicales se desarrollen en el área oceánica del Atlántico, mientras que cuatro podrían formarse en el mar Caribe y otros dos en el golfo de México.

Con una probabilidad del 85%, se espera que al menos un huracán se origine e intensifique en el Caribe, y existe un 70% de probabilidad de que uno de origen atlántico ingrese a la región caribeña. Además, hay un 80% de riesgo de que Cuba sea afectada por al menos un huracán, con una probabilidad aún mayor del 90% de que al menos un ciclón tropical afecte la isla.

La temporada ciclónica en el Caribe se extiende desde el 1 de junio hasta el 30 de noviembre. El año pasado, los expertos pronosticaron entre 12 y 17 tormentas con nombre y entre cinco y nueve huracanes, con la posibilidad de que entre uno y cuatro de ellos alcancen una gran intensidad, alcanzando las categorías 3, 4 o 5.

Los daños potenciales causados por los vientos y las lluvias asociadas con los ciclones podrían incluir inundaciones, caída de árboles, interrupción del suministro eléctrico, daños en techos y estructuras vulnerables, resaltando la importancia de la preparación y la respuesta ante estos eventos naturales.