LA PRIMERA RECETA DE MARIANO HERRÓN PARA CURAR RÁPIDO LA HERIDA DE BOCA
Sin tiempo para lamentos, el Xeneize afrontará el miércoles un duro clásico ante San Lorenzo con la consigna de ganar y reforzar la búsqueda del pasaporte a la Copa de 2024.
BOCA aún siente supurar la profunda herida ocasionada por Fluminense el pasado sábado, pero tras la renuncia del cirujano a cargo de la intervención a corazón abierto, es el médico de guardia el que proporcionará los medicamentos necesarios para recomponer la maltrecha estructura y salir a dar batalla una vez más, porque "el show debe continuar" y enfrente estará un rival clásico: San Lorenzo.
Mariano Herrón, entrenador de la tercera y habitual capeador de temporales, como ya ocurrió tras la salida de Hugo Ibarra, es ahora la solución interina post Jorge Almirón y con apenas 2 días de trabajo tendrá que lidiar con un toro habitualmente bravo para las huestes xeneizes, ya que el Ciclón que ahora comanda Rubén Darío Insúa tiene prevalencia en el historial.
El vicepresidente Juan Román Riquelme anunció este lunes en conferencia de prensa que Herrón será el DT por lo que resta de la temporada y el desafío es importante, ya que todavía hay vías abiertas para clasificar a la Libertadores 2024: la Copa de la Liga, en la que habrá que sumar todo lo que queda por jugar para aspirar a un lugar entre los 4 que clasifican a la siguiente instancia, y la Copa Argentina, en la que se encontrará en la semifinal con Estudiantes.
En el ensayo de este martes, paró en cancha un equipo muy similar al de la final copera del sábado: Sergio Romero; Luis Advíncula, Nicolás Figal, Nicolás Valentini, Marcelo Saracchi; Cristian Medina, Pol Fernández, Jorman Campuzano, Valentín Barco; Miguel Merentiel y Edinson Cavani.
De los protagonistas en el Maracaná quedó afuera Frank Fabra, que acusó un golpe en la rodilla y afronta un bajón anímico por haber sido expulsado y dejar a su equipo con uno menos en la final. Incluso el propio Riquelme contó que el colombiano arribó entre lágrimas al entrenamiento del lunes. Tampoco estuvo Equi Fernández, con una dolencia muscular que lo acompaña desde hace varios días.
Mañana quedará zanjada la duda, pero la idea de Herrón es devolverle rápidamente la confianza al grupo titular y hacer que renueven el ánimo con la única forma posible: jugar rápido y ganar.