La charla estuvo a cargo de María García Ferradas, una productora de Bahía Blanca. La intención es conformar un grupo de productores ovinos con fines de exportación directa de carne envasada y animales en pie, desde la provincia de Buenos Aires.

En el encuentro estuvieron presentes representantes de la Secretaría de Desarrollo local e incluso el intendente Martín Randazzo.

Durante la apertura de la reunión, José Ignacio Arroquy destacó la importancia del proyecto y pidió "unificar esfuerzos" para llevar adelante la iniciativa. A continuación los presentes expusieron las realidades propias y las dificultades que encuentran en una producción que es marginal.

García Ferradas habló de la situación actual de la producción y el mercado ovino en la Argentina. En ese marco la cabañera destacó la importancia de volver a la comercialización internacional. "Para ello -recalcó- es necesaria la unidad de los productores" porque actualmente "cada uno "trabaja puertas adentro". Asimismo sostuvo que están dadas las condiciones para llegar a la exportación y que el país vuelva a ser lo que alguna vez logró con este tipo de producción.

Asimismo la especialista ponderó las bondades de la provincia de Buenos Aires para llevar adelante explotaciones extensivas de ovinos: tenemos la posibilidad de tener alimentos y dos servicios, hay frigoríficos y está la posibilidad de comercializarlos.

Por otra parta habló de la competencia desleal que se genera actualmente en la venta sin control por ello repitió en la necesidad "de que los productores nos unamos"

El grupo LAMB.AR se inició hace pocos meses y ya cuenta con unas 100 mil cabezas para exportar por ello García Ferradas apuntó que "se necesita del compromiso de todos" para que siga creciendo el proyecto. Y esa fue la intensión de la charla en La Madrid -la quinta que se hace en la provincia- que tuvo como objetivo ver la posibilidad de reunir ovejeros del sudoeste.

La representante de la Cabaña Santa Asunción contó que la iniciativa nació "para ver si era posible la exportación y vimos que el mundo nos quiere comprar".

Y en ese contexto destacó la posibilidad de que sean los propios productores quienes formen parte de la comercialización, y no que sea tercerizada la producción. Para poder planificar una exportación ovina "necesitamos trabajar en equipo", repitió María García Ferradas.