Alrededor de las 17 un par de decenas de personas se dieron cita frente a la Escuela Nº 14 de la localidad serrana. El horario pautado para el encuentro no fue azaroso, sino que se trató en el momento en el que finalizaba la jornada educativa, teniendo el pico de confluencia de vecinos entre padres y alumnos. Con pancartas con leyendas con frases tales como "justicia", "cuidemos nuestro pueblo" o "culpable a la cárcel" se apostaron en ese sitio y relataron lo ocurrido. "Si no lo meten preso, por lo menos que se tenga que ir del pueblo", se quejó el padre de la víctima, Sergio Fuhr.

De acuerdo con lo que el hombre relató, todo ocurrió ya en la noche del último viernes en el centro de Sierras Bayas. Alrededor de 15 niños compañeros de salón de la Escuela Nº 14 se habían juntado a cenar en un bar cercano. Finalizada la comida se cruzaron a jugar en la plaza. Según siguió el hombre, uno de los chicos había ido al lugar en su bicicleta, una de estilo BMX.

Todos comenzaron a dar vueltas con la misma, alternando el turno. Todo se habría dado en ese momento, cuando la hija de Fuhr habría tomado la bicicleta y comenzado a recorrer la plaza. Su recorrido se habría visto obstaculizado por un hombre de entre 47 y 50 años, que también se habría encontrado con la presencia de un niño, a quien habría subido al caño del cuadro de la bicicleta. En ese entonces también había aprovechado la ocasión para tocar a la víctima en sus partes íntimas.

La niña habría relatado lo ocurrido la mañana siguiente, dando lugar a que sus familiares formalizaran la denuncia en la sede policial de la localidad. Con el correr de las horas las actuaciones habrían pasado a manos de la Comisaría de La Mujer, tomando intervención también la fiscal en turno Susana Alonso, titular de la Unidad Funcional de Instrucción Nº 7. Según se logró averiguar, las actuaciones, en principio, se encuentran caratuladas como "abuso simple".

Por otra parte, se supo que tanto el padre junto con otro grupo de personas se presentaron en el domicilio del presunto atacante en pedido de explicaciones. De acuerdo con lo que trascendió, se habrían suscitado una serie de incidentes que habrían dado inicio a la formación de una nueva causa. El hombre habría resultado agredido, pero no registrado heridas de consideración.

Ayer, ante la falta de medidas concretas contra la situación procesal del único sindicado como autor material, decidieron los familiares mismos y personas del vínculo más cercano adoptar una postura mucho más activa. "Lo hacemos para que se entere la gente. Lo que buscamos es hacer un poco de ruido para que el pueblo se entere de lo que pasó", señaló Fuhr.

"Es algo pacífico más allá del dolor y bronca, jamás pensé que iba a estar en esto. La verdad es que no te quedás tranquilo, no sé qué esperan para hacer algo, que pase lo que tenía que pasar. La cagada ya se la mandó no se va a poder volver el tiempo atrás, es un dolor que será el tiempo el que ayudará para poder superarlo", finalizó.

Fuentes ligadas a la causa detallaron que durante el transcurso de las últimas horas distintos testigos se han sumado a la instrucción de la causa. No obstante, la mayoría de los testimonios se limita a situar al acusado en el lugar de los hechos, pero no arrojan demasiado sobre el hecho puntual. Sin embargo, esa recolección de testigos habría dado lugar a la formación de nuevos causas en contra del sindicado. Inclusive, una de ellas habría dado cuenta de "exhibiciones obscenas".

Asimismo, para conocer aún más sobre lo sucedido se aguarda con que en el transcurso de los próximos días la propia víctima sea citada a dar su versión de los hechos, lo cual se realizaría por medio de una cámara Gesell. Idéntica condición se daría con alguno de los otros niños que estuvieron presentes aquella noche.