El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, dio su versión del encuentro con parlamentarios al asegurar que dieron su "pleno respaldo a la posición argentina" en la negociación con los fondos buitre, en tanto que el radicalismo pidió "solucionar el cien por ciento de la reestructuración de la deuda".

Capitanch, el ministro de Economía, Axel Kicillof; y el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini, estuvieron dos horas y media de reunión reservada con los presidentes de bloque y autoridades del Senado y de la Cámara de Diputados.

Según el funcionario, más allá de las distintas "aristas" manifestadas desde la oposición "repudiaron la actitud de los fondos buitres".

También dijo a la prensa que los legisladores coincidieron en considerar que el fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos resulta "lesivo para la soberanía nacional y los intereses de nuestra Patria".

Capitanich fue el único funcionario que dio información, aunque muy breve, a periodistas después de la reunión acompañado en el Salón de Pasos Perdidos por el presidente de la cámara baja, Julián Domínguez, el vicepresidente alterno del Senado, Gerardo Zamora, el presidente del bloque de senadores del FPV, Miguel Pichetto y su par de Diputados, Juliana Di Tullio.

Sin dar demasiados detalles de lo ocurrido en la reunión cerrada, el diputado y precandidato presidencial radical por el Frente UNEN, Julio Cobos, indicó que Zannini les transmitió a los legisladores que "es la intención del Gobierno solucionar el cien por cien de la reestructuración de la deuda".

Empero, el senador Ernesto Sanz (UCR) señaló que el Poder Ejecutivo no adelantó la estrategia que plantearon ante el juez de Nueva York, Thomas Griesa pero adelantó que el Frente UNEN respaldará una negociación que preserve a los acreedores con deuda reestructurada pero "pero lo que no vamos a acompañar son aventuras, locuras ni estrategias amateur".

El senador afirmó que en lo que respecta al Frente UNEN "vamos a acompañar todas las decisiones que sean prudentes, serias y responsables, que preserven lo que ha logrado la Argentina" en materia de restructuración de deuda aceptada voluntariamente por el 92,4 por ciento de los acreedores.

Al inicio de la reunión, Kicillof trató de hacer una historia de la deuda que irritó a los legisladores, entre ellos el senador Fernando Solanas (Proyecto Sur), que fue el primero en abandonar el Salón donde se hizo la reunión.

Solanas contó después que las preguntas estaban "muy acotadas" para los legisladores pero que él les preguntó a los funcionarios "¿qué han hecho ustedes con mayoría absoluta en ambas cámara para recuperar la soberanía de tribunales argentinos", porque destacó que "hemos delegado la soberanía de nuestros tribunales en tribunales extranjeros".

En contra de lo manifestado luego por sus pares de la UCR y socios políticos, Solanas manifestó que ante el cuadro que se presenta "el bloque Frente Amplio UNEN no los acompaña al entierro, le pide a ustedes que salven al enfermo que se está muriendo".

Darío Giustozzi junto a Graciela Camaño y Alberto Asseff, por el Frente Renovador, en Diputados, expresó la decisión "de acompañar a la Argentina en una política de Estado" pero sin entrar en mayores definiciones dijo que su intención es "colaborar" con el Gobierno proponiendo la creación de una comisión bicameral parlamentaria, con participación de economistas, para un seguimiento del tema.

Para Néstor Pitrola (FIT), "no vamos a acompañar que se pague la deuda ilegítima y usuraria", en tanto que Nicolás Del Caño (PTS) también rechazó que la reunión se hubiera realizado "a puertas cerradas" y propuso "consultar al pueblo cómo resolver este tema crucial para la soberanía nacional".

DyN