Kicillof afirmó que "la Argentina tiene voluntad de pagar sus compromisos", pero advirtió que "si se aplicara la sentencia de (Thomas) Griesa y la Argentina se viera obligada a pagar a los fondos-buitre, el país sería empujado a un default".

Ante esa posibilidad. el ministro expresó que hacer frente al desembolso de 1.330 millones de dólares tal como lo dictaminó el juez, generaría nuevos reclamos por 15 mil millones de dólares.

Pero, además, el ministro recordó que "Griesa dijo que no quiere llevar a la Argentina al default" y ante esa declaración anunció que enviará una delegación de abogados a Nueva York "para hablar" con el magistrado para interpretar esos dichos.

Kicillof formuló estos anuncios durante una presentación que realizó en el Palacio de Hacienda.

El ministro rechazó las propuestas que sugieren entablar canales de diálogo con los holdouts: "Los buitres son buitres porque no negocian", enfatizó.

El jefe del Palacio de Hacienda precisó que la Argentina tiene que cancelar servicios de la deuda por 900 millones de dólares el 30 de junio, pero advirtió que si lo hace en las condiciones actuales ese pago podría ser embargado.

"Nosotros queremos pagar y vamos a pagarle a los bonistas que confiaron en el país pero no podemos permitir que nos empujen a un default", insistió el ministro.

"El problema es que para pagarle a ellos también tenemos que pagarle a los buitres y entonces son 15 mil millones de dólares" y recordó que es "más de la mitad de las reservas". "A medida que se vayan sumando otros acreedores será mucho más", agregó.

Kicillof interpretó que el pago de 1.300 millones de dólares inmediatamente habilitará a un reclamo de acreedores que están en similares condiciones por otros 15 mil millones de dólares, apelando al tratamiento igualitario. No obstante, no dio precisiones de cómo se llegó a ese monto.

Además dijo que "si se le paga a los fondos-buitre, eso dará lugar a un reclamo de los bonistas que entraron en el canje, al ejercer la cláusula que está contenida en los contratos, con lo cual, el reclamo sería multimillonario".

El ministro recordó que "Griesa le ordenó al banco de Nueva York que no les pague a nuestros bonistas si no que se le pague a los buitres". "La sentencia de Griesa por un lado o por el otro nos empuja al default", reiteró el funcionario.

El ministro también anunció que el miércoles a las 10 se reunirá con los presidentes de los bloques parlamentarios para ofrecer detalles de cómo es la situación.

El funcionario subrayó que "esto está estudiado en profundidad" e insistió en que "se tomaron las medidas para que la reestruturación no esté en riesgo".

DyN