La sesión, que se había iniciado cerca del mediodía, se interrumpió abruptamente cuando un grupo de diputados de la oposición se levantó de sus bancas para pedir que se suspenda el debate por los incidentes que se producían en las afueras del Congreso.

Varios legisladores habían salido a ver qué ocurría en la calle, y al volver a ingresar irrumpieron en el recinto reclamando la suspensión. Tras varios intentos infructuosos del presidente del cuerpo, Emilio Monzó, por reencauzar el debate, varios legisladores cruzaron insultos y amenazas, e incluso los diputados Daniel Filmus (FpV) y Nicolás Massot (Cambiemos) estuvieron a punto de trenzarse a golpes.

Según denunció Filmus públicamente, el diputado de Cambiemos "le gritó a (Leopoldo) Moreau que salga afuera del recinto para pelear". Massot, por su parte, no negó el hecho, y dio a entender que lo hizo para "defender el honor mío y de mi familia".

En este clima, finalmente Monzó otorgó un cuarto intermedio de 10 minutos en las bancas, plazo que se prolongó más de una hora. Después de las 17 se retomó la sesión (DIB)