Se celebra hoy el Día del Médico y Roberto Bollini, especialista en cirugía general e infantil, será uno de los médicos que participará en los actos conmemorativos que tendrán lugar bajo la organización del Círculo Médico Olavarría.

"De chico se despertó la vocación para ser médico. Ésto fue orientado un poco por mi papá, que fue también médico. En mi juventud lo acompañaba a hacer los domicilios, iba con él a la casa de los pacientes, llevaba un maletín con los instrumentos y miraba como examinaba a los pacientes. Yo le llevaba ese maletín", explicó Roberto Bollini cuando se refirió al momento de elegir por esta profesión.

"Me gustaba mucho ver cómo trataba a los pacientes y todo lo que hacia para resolver las dificultades de ellos. Y a partir de ahí me empezó a gustar la profesión y luego tuve la oportunidad de estudiar lo que quería. Toda la vida voy a estar agradecido por esto", agregó el médico recibido en la Universidad Nacional de La Plata a los 23 años de edad.

Luego de recibirse y convertirse definitivamente en médico, Roberto Bollini contó cómo vivió todo lo que vino en sus 25 años de trayectoria profesional. "Fue un lindo camino, con decisión propia para hacer las cosas y sobre todo con ganas de hacer bien las cosas. Por suerte hoy mantengo las mismas ganas de siempre de seguir ejerciendo la profesión en mi especialidad, la cual siempre me gustó y hoy la puedo ejercer con orgullo", señaló.

En este sentido, el médico agregó que "claro que fue un camino con dificultades, como todo camino de la vida. Es una carrera difícil pero por suerte pude superar cada uno de los obstáculos que se me presentaron. Cuando me tocó elegir la especialización no dudé e hice primero cirugía general para después encarar infantil. Y acá estoy, ejerciendo todo lo aprendido y poniéndolo en práctica con mucho entusiasmo. Hoy estoy conforme con todo lo que hago, pero fueron horas de sacrifico y mucho estudio. No hay que negar ésto".

El doctor Roberto Bollini también hizo mención a lo que le dio la profesión en todos sus años de trayectoria. "La profesión me dio un poco de todo en la vida, algunas ingratitudes pero muchas satisfacciones. Pero si uno pone todo en la balanza siempre se guía por las cosas positivas y lindas que me ofreció la carrera. La medicina tiene su parte buena y su parte mala. Uno trata con pacientes y personas que tienen problemas, las cuales a veces uno las puede resolver y en otras situaciones escapan al alcance de lo que uno puede hacer. Y éstas son las ingratitudes que a veces le tocan vivir a uno en lo personal, pero a la vez estamos preparados para afrontar estas situaciones. Se llega hasta cierto límite. El hombre propone y Dios dispone", analizó."Pero es algo muy lindo y que uno lo hace con gusto", destacó.

Entre los aspectos que más enorgullecen a Roberto Bollini de su profesión, señaló "el hecho de poder ayudar a las personas. En mi caso particular hago la parte de cirugía infantil, entonces me pone muy feliz cuando puedo resolver el problema de un pequeño y que salga todo bien, y que la familia esté agradecida. Es una profesión que me hace feliz y así será para siempre".

En el cierre, el experimentando profesional le dio un breve consejo a aquellos médicos que están iniciando su camino en el ámbito profesional. "Si se recibieron tuvieron que hacer el mismo esfuerzo que hizo uno cuando le tocó estudiar. En este sentido, les diría que nunca pierdan el gusto y la vocación en la carrera que tienen por delante; que siempre piensen en el paciente y en mejorar su situación; que no le generen más conflictos a la gente sino lo contrario, buscar los caminos para llegar a una solución; no tener soberbia y saber hasta qué punto uno puede llegar, cuando tener qué consultar o enviar a otros especialistas y otros profesionales; que no se dejen llevar por muchas situaciones, sobre todo las económicas", enfatizó.

"Que trabajen de forma simple, con sentimiento, ganas, fuerza y vocación. No perder todo ésto", concluyó.