El intendente Ezequiel Galli salió al cruce el miércoles de los integrantes de la agrupación de 1° de Octubre que volvieron a realizar un corte de ruta a la altura de la empresa Cerro Negro.

Los manifestantes, que bloquearon el paso en la Ruta Nacional 226, reclaman mayor asistencia a través de plantes de sociales o, directamente, piden por fuentes de trabajo que les generen un sustento y puedan cubrir sus necesidades básicas.

Mientras circulaba la versión de un posible desalojo por parte de las fuerzas policiales y en medio de un clima social tenso, Ezequiel Galli les respondía cerca del mediodía con dureza, a escasos kilómetros de ahí.

Interrumpir la circulación del tránsito en una ruta "es un delito y si continúan con la comisión de este delito vamos a realizar la denuncia para que actúe la Justicia porque no se puede cortar una ruta nacional", enfatizó el jefe comunal.

Galli hizo estas declaraciones en compañía justamente del ministro de Desarrollo Social de la Provincia, Santiago López Medrano, que ayer estuvo en Olavarría y recorrió obras en los barrios Eucaliptus y Belén, además de visitar el Centro de Fía "Mujeres Adolescentes". El Intendente cuestionó el reclamo de los manifestantes apostados a pocos metros de ahí y la postura adoptada ya que plantearon la ausencia del Estado y dispararon contra la gestión comunal.

"El Municipio tiene las puertas abiertas. Hablan de que están solos y eso es mentira. Tenemos asistencia en todos los barrios de la ciudad", aseguró Galli que fue aún más lejos: "habría que ver y que nos expliquen qué es lo que hacen con la comida que reciben".