Como todos los años en el mes de septiembre la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Ultimos Días está trabajando en la organización de su actividad anual en el marco del programa "Manos mormonas que ayudan", el que fuera establecido en 1998 y desde entonces cientos de miles de voluntarios han donado millones de horas de servicio a sus comunidades. El programa se inició en América del Sur, pero desde entonces se ha extendido a casi cada rincón del mundo.

En nuestra localidad hace varios años que se viene implementando. En 2017 se trabajó en tareas de pintura, parquizacion y otras reparaciones en el CIC del Barrio Facundo Quiroga 2. Con una asistencia de más de 60 voluntarios se pintaron consultorios, SUM y juegos, en una jornada de trabajo intensiva.

Este año el servicio se desarrolló este lunes por la mañana en instalaciones de la Escuela 502, situada en Balcarce al 3700, y además de pintar y refaccionar las instalaciones, también se hará donación de mobiliario al mencionado establecimiento educacional.

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Carolina Páez, referente de la institución, destacó el mayor alcance de la actividad en este 2018: "Hemos doblegado el esfuerzo. Si bien está planeada para un día puntual, el trabajo de voluntarios se viene realizando desde ya hace un tiempo, y trabajando en conjunto con la cooperadora de la escuela hemos logrado conseguir los materiales. Este año más gente se ha sumado a la propuesta. La Municipalidad entregó un subsidio a la escuela con el que se afrontó una parte de los materiales, otros fueron adquiridos con fondos de la cooperadora y luego algunos comercios se sumaron con algún aporte. Estamos muy agradecidos a todos ellos, ya que este aporte resulta esencial para el éxito de la jornada. Por otro lado la iglesia incorporó también a voluntarias adultas que colaboraron tejiendo mantas para los niños de la escuela. Además, está planificada la entrega de mobiliario a la institución. Realmente esperamos que sea una jornada exitosa, ya que también tendremos la colaboración de algunos integrantes de Bomberos Voluntarios que se sumaron para hacer las tareas en la escuela".

A nivel institucional este no es el único servicio que la iglesia presta a la comunidad. En todo el mundo cuando las catástrofes han golpeado a algún país en particular, por medio de los fondos de la iglesia para ayuda humanitaria se ha colaborado con personas y gobiernos para aliviar las cargas de los que han sufrido pérdidas devastadoras. Si desea conocer más sobre los servicios de la iglesia, se puede visitar la página www.lds.org