Darío Machado

@dariomachado9

"Realmente esta gente tenía una metodología de trabajo que de manera impune se manejó siempre así y siempre logró los resultados queridos, porque extorsionaba, porque apretaba gente. Hoy están detenidos y por algo están detenidos", expresó el abogado Gustavo Scotto, y apuntó directamente al comisario inspector Carlos Marcelo Blanco.

El ex jefe de la Delegación Departamental de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas y Crimen Organizado de Azul estuvo al frente de los operativos que se realizaron en noviembre de 2018 por la causa de narcotráfico donde quedaron detenidos, entre otros, los hermanos Pablo y Marcos Cairo, pero a mediados de 2020 el policía fue detenido por integrar una banda que era liderada por el fiscal (suspendido) de San Isidro, Claudio Scapolan.

Desde los primeros meses de la investigación, que en Olavarría incluyó la detención de 7 personas, y el secuestro de gran cantidad de dinero en efectivo, vehículos y otros elementos, los defensores de algunos de los acusados comenzaron a enviar recursos al Juzgado Federal de Azul con el objetivo de exponer ciertas "irregularidades" en los procedimientos que habían llevado adelante los agentes de la dependencia que, en ese momento, lideraba Blanco.

"Todos descubrimos las mismas falencias, que había una anormalidad manifiesta en los procedimientos que era muy notoria, y así lo manifestamos en las distintas apelaciones que hicimos, y nunca se le dio importancia de que en realidad esté el procedimiento bien hecho", expuso Scotto junto a Martín Paroli, a quien asiste legalmente, en una entrevista concedida a EL POPULAR. Las fallas que detectaron y manifestaron eran varias, y algunas de suma gravedad, como "plantar las pruebas", según refirieron.

Los planteos de Scotto y su defendido apuntan no sólo a Blanco, detenido ahora por una causa por extorsionar a personas a cambio de no crear "causas truchas" como por la reventa de drogas secuestradas en procedimientos que se realizaron entre 2012 y 2015, sino también a algunos de los efectivos que trabajaron en los allanamientos realizados el 13 de noviembre de 2018. A uno de ellos, incluso, se le inició una causa por cobro de coimas en locales nocturnos de la ciudad, y, según refirieron, fue desafectado de la fuerza.

Acerca de este último agente, Scotto indicó que "eran allanamientos en forma simultánea y él fue a uno, después a otro y después a otro. Cuando en realidad se comisiona un grupo de gente y cada uno va a distintos domicilios, y no se puede andar cambiando. Hay un superior que ordena y eso no se respetó, evidentemente hubo un incumplimiento de los deberes de funcionario público, que en realidad era una connivencia entre ellos que a nadie le importa: había alguien que dio toda la vuelta, que recorrió varios domicilios, que hoy está separado de la fuerza por una denuncia y está siendo investigado".

Paroli agregó en este sentido que "denunciamos esos hechos, no se lo investigó por lo que nosotros habíamos denunciado, y hoy están detenidos justamente, uno está separado de la fuerza por extorsión, por coimas, y Blanco está detenido por armado de causas, plantar pruebas, extorsión".

Además Paroli indicó que "algo que ocurrió, que es muy llamativo, y quien ve la causa se da cuenta, es que donde fue la Policía Federal a hacer los allanamientos dieron todos negativos, y donde fue Drogas Ilícitas dieron todos positivos. Además hicieron un circo, y trajeron todas las cámaras del Ministerio de Justicia. Con todas las cámaras del Ministerio de Justicia había cero posibilidad de que los allanamientos dieran negativo".

Scotto insistió en que, sobre los procedimientos de 2018, "hay nulidades que son manifiestas. Cuando se lo denunció oportunamente teníamos esperanzas todos los letrados de que diera un vuelco la causa o que se analizara. Pero las apelaciones no llegaron a buen curso ninguna. Por eso a la hora del planteo en el juicio se verán y el juzgado analizará. Y por supuesto, vamos a traer a colación que hoy vemos comprometido al mismo personal con las mismas cosas que decíamos nosotros en causas paralelas, que si bien tramitan en la Provincia está detenido por lo mismo que denunciamos nosotros".

"Nos arruinaron la vida"

Poco tiempo atrás, Paroli, quien actualmente se encuentra bajo el beneficio de prisión domiciliaria, presentó una denuncia en la Fiscalía General del Departamento Judicial de Azul, que quedó radicada en la Unidad Funcional de Delitos Especiales.

En la misma, el olavarriense denuncia directamente por su desempeño en el operativo de 2018 a Marcelo Carlos Blanco, quien está detenido en el Complejo Penitenciario II de Marcos Paz. Allí expone la causa por la que el ex titular de Drogas Ilícitas está imputado, que se tramita en el Juzgado Federal Nº 1 de San Isidro, que coordina Sandra Arroyo Salgado, y que investiga al fiscal Claudio Scapolan y más de 20 policías por "asociación ilícita". Uno de los hechos está vinculado al operativo "Leones Blancos", del año 2013 en el partido de Moreno, donde incautaron un cargamento de alrededor de una tonelada de cocaína, aunque oficialmente sólo se consignó la mitad.

"En mi declaración testimonial yo declaro que es una causa armada que incluyó plantar las pruebas y malversar la información de la investigación en mi contra, nunca tuvimos derecho a la defensa, porque lo planteamos y jamás se nos escuchó ni se investigaron los hechos sucedidos", agrega el documento, en referencia a los allanamientos realizados en Olavarría.

Además expuso que "este accionar delictivo denunciado oportunamente por quien suscribe y por todos los detenidos nunca fue tenido en cuenta por el Ministerio Publico Fiscal originando un grave perjuicio a estas partes. Ese accionar llevó a que perdamos lo más preciado que posee un hombre luego de la vida, que es su libertad. Esta ineficiencia y falta de criterio al investigar sin perseguir la verdad de los hechos hoy sale a la luz. Tarde realmente para reparar el perjuicio ya que la causa se elevó al Tribunal Federal de Mar del Plata, con esta fórmula delictiva llevada adelante prolijamente por esta persona".

Al ser consultados sobre el propósito final de esta denuncia, Scotto refirió a este Diario que el objetivo es que el Ministerio Público Fiscal lo tome "como un antecedente y si investiga se va encontrar con estas anomalías". Si a partir de esta presentación se sumaran "estas anomalías" como prueba más para la causa que se tramita en San Isidro, posteriormente serviría como un elemento de la defensa para reiterar en la instancia de juicio "las irregularidades" que sucedieron durante los procedimiento realizados en Olavarría.

La investigación por estos operativos está desdoblaba, y la referida al "lavado en activos" sigue abierta. En tanto, la vinculada a la tenencia de estupefacientes con fines de comercialización tiene como próxima instancia el juicio oral y público, que se concretará en el Juzgado Federal de Mar del Plata, aunque aún no hay fecha establecida. "Es bueno que sepan que vamos a ir todos a juicio, vamos a quedar absueltos y no vamos a parar hasta verlos presos. A nosotros nos arruinaron la vida", cerró la entrevista con indignación Martín Paroli.