Curar con imanes, otra alternativa para sentirse bien
Se trata de una terapia alternativa que puede mejorar el estado del cuerpo gracias a la aplicación de imanes. La especialista en el tema, Estefanía Corvi, nos introdujo a este mundo donde hay puntos claves de nuestro cuerpo que con la estimulación de los imanes pueden hacernos sentir mejor.
En Olavarría muchos profesionales lo realizan y Estefanía Corvi, nos contó detalles de esta terapia que ella practica y que enseña.
La imanterapia es aplicada para regular los procesos físico- químicos. Hoy logró ser más conocida y aceptada como una disciplina en varios medios pseudocientíficos y de medicinas alternativas.
"El tratamiento con biomagnetismo está indicado para pacientes que padecen diferentes tipos de patologías debido a infecciones, lesiones, incluso síntomas de resfriado, diabetes, lesiones musculares, o hasta para tratar tumores, por ejemplo. Se trata de una terapia alternativa que puede mejorar el estado del cuerpo gracias a la aplicación de imanes", expresó la profesional.
Aplicación de los imanes
Estefanía realiza constantemente esta terapia a sus pacientes y nos contó cómo es y qué sucede en una sesión. "El paciente debe estar recostado y relajado, además de bien hidratado, alimentado, y es aún mejor si está abrigado. Esto es esencial para que los imanes actúen como deben. Lo mejor, es que no se requiere de electricidad ni que el paciente se quite la ropa", detalló. Las sesiones suelen tener una duración de una hora, dependiendo de cada caso, suelen estar espaciadas entre una y dos semanas. El terapeuta hará saber cuántas sesiones se necesitan según el motivo de la consulta.
"Existen personas que se recuperan pronto, incluso con una sesión, pero otras, es posible que necesiten varias sesiones antes de ver mejoras", añadió. Y lo que hace en cada oportunidad es dejar actuar los imanes durante unos 10-15 minutos para ser reconocidos por las zonas de potencial energético en el cuerpo, y así comenzar a regular el órgano, tejido, glándula, enzima, que sea necesaria para el tratamiento del paciente.
"En general, la terapia con imanes se basa en el concepto del "Par Magnético" (positivos y negativos). Los imanes comunes poseen potencia superior a 1000 Gauss, los que ayudarán a acercar al organismo a su NEN (Nivel de Equilibrio Normal). En casi todas las enfermedades, los microbios poseen ADN con el que se comunican a distancia por ondas magnéticas, y por ello los imanes se posicionan en puntos clave para interferir con este proceso".
La terapia no es excluyente, "busca acompañar otras disciplinas para mejorar el estado del cuerpo y el organismo del paciente, para que puedan tener una mejor evolución y curación".
El biomagnetismo es compatible con otras prácticas alternativas como la Homeopatía, Reiki, Flores de Bach, Naturopatía, Aromaterapia, y hasta otras más habituales como la acupuntura.
Estefanía resaltó algunos puntos sobre el biomagnetismo, "no pretende sustituir tratamientos médicos, no posee efectos colaterales y no es invasiva. Es una terapia simple y efectiva a la hora de erradicar virus, hongos, bacterias y parásitos del cuerpo humano. Los imanes no son tóxicos ni alteran ni dañan los tejidos orgánicos".
El alivio posterior
¿Qué experimenta una persona al practicar esta terapia? "alivio del dolor", reconoció la profesional. Y agregó que se produce por: aumento de la liberación de Beta-endorfinas, bloqueo / inhibición de mensajes de dolor al cerebro, relajación de los músculos tensos, aumento de la circulación, lo que resulta en un aumento de la oxigenación de la zona de dolor y la eliminación acelerada de las toxinas asociadas con el dolor.
Se trata de una revolución en el tratamiento de lesiones musculares, dolor en las articulaciones y problemas de postura. Aumenta el flujo sanguíneo a través de los capilares, resultando en mejora de la oxigenación del cuerpo, eliminación más rápida y eficiente de toxina, ayuda a bajar / estabilizar la presión arterial y en la ayuda de prevención de la arteriosclerosis, accidentes cerebrovascular y otros problemas circulatorios.