La donación voluntaria, libre y gratuita, aumenta la posibilidad de las personas que requieren un trasplante de este tipo, ya que el 75% de los pacientes no tiene un donante compatible en su familia.

Pueden ser donantes todas las personas entre 18 y 40 años, que tengan buena salud, pesen más de 50 kilos y no cuenten con antecedentes de enfermedades cardíacas, hepáticas o infecto-contagiosas.

Con respecto al procedimiento, para entrar al Registro Nacional, deberán realizar una donación de sangre y de esta manera se extrae la cantidad convencional (450 ml). Luego una parte de esa sangre se analiza genéticamente para evaluar compatibilidades con los datos genéticos de los pacientes que necesitan un trasplante y el resto se los utiliza en las personas que necesitan tratamientos y cirugías. Posteriormente el donante recibirá en su domicilio la cédula de inscripción al Registro de CPH.

A partir de allí, si un paciente con datos genéticos idénticos al donante necesita un trasplante de médula ósea, se lo convoca desde el Registro.

Como la inscripción es un acto voluntario, entonces todo donante puede cambiar su decisión cuando lo desee, comunicándose con el Registro para su remoción.

Hay que remarcar que son muchísimas las personas en lista de espera para un trasplante y sólo 1 de cada 4 pacientes tienen un donante compatible en su grupo familiar. Los otros 3 pacientes necesitan recurrir a un donante no emparentado.

Por otra parte los que se inscribieron pueden corroborar su ingreso a la base de datos informatizada del Registro Nacional de Expresiones de Voluntad para la Donación.

En caso que el paciente compatible sea de otro país, al estar reglamentada la búsqueda y el traslado de CPH para el trasplante, ni el paciente ni el donante deben viajar. Las células extraídas son enviadas por el Registro Nacional al lugar donde se encuentra y se realiza el trasplante que le permitirá reintegrarse sano a la sociedad.

Desde el Municipio destacan que el Servicio de Hemoterapia se encuentra en condiciones para inscribir donantes, porque está avalado por el Instituto Central Único Coordinador de Ablación e Implante, así mismo el personal del servicio cuenta con la capacitación previa del Incucai.