Alrededor de las 22.15, un fuerte vendaval castigó a Olavarría y causó voladuras de techos, caídas de cables y de postes de alumbrado, además de arrancar carteles publicitarios que quedaron tendidos sobre la vía pública.

En un lapso de pocos minutos, los llamados vecinales a los servicios de emergencia fueron múltiples y la labor de policías, bomberos y operarios fue de mucha intensidad.

En el pico máximo de la tormenta, las ráfagas superaron los 90 kilómetros por hora. Fue en esos instantes, alrededor de las 22.20, cuando se produjeron la mayor cantidad de incidentes.