Florencia Lo Greco, docente de ATDI (Atención Temprana del Desarrollo Infantil) y Estimuladora Temprana, sostiene que "cuanto más la sociedad conozca sobre la función de atender tempranamente una problemática en el desarrollo de los niños, mayores serán las chances de revertir o minimizar dicha situación".

Es por ello, que el CeAT continúa funcionando hasta hoy, con la salvedad de que ya no se encuentra en su sede anterior de Lamadrid 3056, sino en un nuevo edificio ubicado en Laprida 2015, pegado a la Escuela Especial Nº 502, desde marzo de 2021.

Identificar las señales

Según Lo Greco, es importante que las familias, ante cualquier duda, realicen las consultas necesarias lo más pronto posible, ya que "cuanto antes se detecten las dificultades, mayores son las posibilidades de generar nuevas oportunidades de aprendizaje en los niños", afirma la docente.

Lo Greco enumera que las señales más frecuentes a las cuales se les deben prestar atención son las siguientes: poca o nula respuesta del niño o la niña cuando le llaman por su nombre a los 18 meses o posterior, ausencia o retraso en la aparición de las primeras palabras o de recursos del lenguaje, dificultad para lograr que el niño o niña se autorregule apareciendo conductas agresivas, entre otras.

"Es importante realizar, ante la menor duda, una evaluación integral, ya que muchas veces un indicador de estos en forma aislada quizás no amerita una intervención", señala Lo Greco. Para recibir asesoramiento profesional sobre el desarrollo infantil, las familias pueden acercarse a la actual sede, Laprida 2015, de lunes a viernes de 8 a 17 horas.

Adaptarse a la pandemia

"Con respecto a la pandemia, y específicamente el año pasado, tuvimos que continuar el acompañamiento a las familias en forma virtual. Lo cual resultó bastante complejo, ya que nuestro rol como docentes de ATDI es poner el cuerpo en la escena de trabajo, a través del juego, favoreciendo la comunicación, el intercambio de miradas, de gestualidades, algo que detrás de una pantalla se volvió casi imposible", relata la profesional.

Esta necesidad de mantener la conexión con las familias y los niños, llevó al CeAT a recurrir a la virtualidad, como tantas otras instituciones de este tipo en Olavarría.

Así, durante la cuarentena, las rutinas del día a día implicaron "observar y evaluar a través de los videos y otros insumos que nos hacían llegar los padres y madres. Y también realizar acompañamientos a través de videollamadas, en el caso de que la familia tuviera acceso a estos recursos", explica Lo Greco.

Además, el Centro de Atención Temprana del Desarrollo Infantil participó en el servicio alimentario que coordina el Consejo Escolar, repartiendo alimentos para las familias que fueron más golpeadas económicamente por la situación.

Florencia Lo Greco asegura que dentro del CeAT, los profesionales trabajan "con un protocolo de atención y permanencia, con el cual se extreman las medidas de higiene y cuidado tanto para los alumnos y alumnas como para sus familias y el equipo docente".

El Centro, que cuenta con un equipo de cuatro docentes que atienden diariamente y un equipo de profesionales que brindan asesoramiento, está a disposición de cualquier familia o persona que necesite asesoramiento, que quiera realizar una consulta, o que requiera de acompañamiento por su situación particular.