El reclamo pretende equiparar las condiciones laborales de los choferes del interior con sus colegas del Area Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y ser incluidos dentro de los rubros esenciales en la campaña de vacunación contra el coronavirus.

"Por ello exigimos el mismo compromiso tanto de las empresas, como de autoridades nacionales y provinciales, ya que son ellas las responsables por el transporte de pasajeros en el interior del país" dice el texto dado a conocer por la gremial antes de la medianoche del miércoles.

El pasado 18 de mayo, tras largas negociaciones que insumieron una decena de horas, UTA y las cámaras empresarias llegaron a un acuerdo sobre la paritaria, lo que desactivó una medida de fuerza.

La patronal y el gremio acordaron un aumento salarial progresivo, consistente en un salario inicial de 70.000 pesos, más una suma no remunerativa de 30.000 pesos para los meses de enero, febrero, marzo y abril de 2021 pagadera en 5 cuotas, la primera de 10.000 pesos y las restantes de 5.000 pesos.

En mayo, julio y agosto 10.000 pesos no remunerativos, con lo cual el salario inicial alcanzará los 95.000 pesos, más un incremento en los viáticos que en mayo son de 9.624 pesos y en septiembre alcanzarán los 12.360 pesos mensuales.

También se acordó en ese encuentro virtual del 18 de mayo que en noviembre comenzarán las conversaciones para fijar una cláusula de revisión si la inflación supera los porcentajes logrados con las paritarias.

El mismo acuerdo firmado para los choferes de corta y media distancia del conurbano bonaerense y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires es lo que la Unión Tranviarios Automotor pretende para los conductores del interior del país.

Así lo ratificó Jorge Padín, delegado de "Olabus" ante el sindicato, muy conforme además con la respuesta de los afiliados locales ante la convocatoria a esta medida de fuerza.

"Nosotros pedimos el mismo tratamiento que los choferes del AMBA, pero queremos también que nos vacunen porque somos trabajadores esenciales, estamos trabajando desde el día cero de la pandemia y no somos considerados así" dijo.

En primer término, Padín se refirió al eco de la protesta.

"El transporte en Olavarría tanto urbano como interurbano está todo parado, sacando los colectivos que trabajan para las fábricas, y estaba mirando que en las principales ciudades del interior pasa lo mismo que acá" celebró.

Luego hizo referencia a las particularidades del reclamo salarial: "Los choferes del AMBA con el mes de mayo van a cobrar el aumento salarial y un bono; nosotros no hemos arreglado la paritaria y no tenemos posibilidad de obtener las vacunas" afirmó el dirigente sindical.

Padín consideró importante la diferencia salarial entre los choferes metropolitanos con sus pares del interior del país.

"Ellos además cobran por el manejo de la SUBE un adicional de 7.000 pesos, y nosotros seguimos cobrando por la ‘boletera’ del año de Ñaupa 64 pesos; la diferencia de viáticos también es importante y en conjunto se hace una cifra de la que estamos bastante lejos. En total son unos 12 mil pesos más que nosotros lo que ellos están cobrando" citó.

En tal sentido, mencionó que un chofer en Olavarría tiene un sueldo inicial de 52 mil pesos.

Expuestos a la circulación del virus por la cantidad de gente que sube todos los días a las distintas unidades, Padín pidió premura en la colocación de las vacunas anti - COVID19.

La demanda forma parte del texto de la UTA: "Somos trabajadores esenciales, brindamos un servicio público imprescindible para toda la sociedad, pedimos al gobierno nacional un plan urgente de vacunación para quienes estamos en la primera línea con el compromiso y la responsabilidad de siempre".

Al respecto, Padín agregó: "Nosotros venimos reclamando desde el momento que empezó la campaña de vacunación. Hemos tenido la suerte de que hubo pocos contagios entre nuestros afiliados, aunque más en la segunda ola que en la primera. Tuvimos reuniones, pedimos que nos den el tratamiento de esenciales y no logramos hasta ahora ninguna respuesta".

El delegado de "Olabus" reconoció que en este contexto no es fácil el cumplimiento de los protocolos dentro de las unidades, lo que como correlato supone un mayor riesgo ante la enfermedad.

"Nosotros lidiamos todo el tiempo con eso. Podemos llevar 10 personas paradas; ahora no anda mucha gente, pero se nos va a complicar para hacer respetar los protocolos cuando el servicio vuelva a la normalidad" advirtió.

No es tan grande el número de dosis que piden los choferes para quedar a buen resguardo de este coronavirus: "Nosotros acá somos 28, de los cuales sólo 3 recibieron la primera dosis. Ellos se anotaron y les llegó la citación; la mayoría estamos anotados y seguimos esperando novedades".

"El sindicato está haciendo gestiones en Buenos Aires para que atiendan nuestros reclamos de vacunas. En eso sí estamos iguales con el AMBA; en lo salarial no" ironizó Padín.

Los choferes de Olavarría permanecen atentos a las novedades que se puedan producir en estas horas, sin embargo la próxima reunión entre el sindicato y la parte empresarial recién está programada para el martes 1 de junio.