Desplegando mucho color, bailes y alegría, cerraron este domingo las celebraciones en el marco de la fiesta de la Virgen de Copacabana, organizada por los pasantes que cada año agradecen y le dan su ofrenda.

A raíz del mal tiempo, los tradicionales festejos se realizaron no en la calle, sino en la casa de uno de los pasantes. Tras la celebración de una misa, se nombró a los pasantes para el año 2019.

Se esperaba realizar posteriormente la procesión por las calles del barrio Provincias Unidas, pero los festejos de bailes típicos de Bolivia debieron hacerse bajo techo, acompañados siempre de la imagen de la Virgen de Copacabana.

Las celebraciones habían dado el sábado cuando se realizó el rezo del rosario y luego hubo una procesión con la imagen de la Virgen por la calles del barrio Provincias Unidas hasta la capilla San Antonio de Padua.