En una celebración ya tradicional en la ciudad, cerca de 30 mil chicos, según fuentes oficiales, se acercaron al CEMO para festejar el Día del Niño, con shows, juegos, payasos y mucha alegría. La clave, además de todas las actividades organizadas, fue el buen tiempo.

"Es el regalo que la ciudad de Olavarría le hace a los pibes de nuestra ciudad", dijo el intendente José Eseverri, quien estuvo en acompañando a los chicos en las diferentes actividades que se ofrecían en el CEMO.

En los diferentes sectores en que fue dividido el predio, tanto afuera como adentro, había payasos, personajes infantiles de Disney, marionetas, lápices de colores, burbujeros y barriletes inflables. Asimismo podrían participar en talleres artísticos, juegos de concientización turísticas, actividades para conocer la fauna del bioparque, armado de juguetes, entrega de eco bolsas, entre otras.

Para la ocasión, se prepararon dos escenarios, tocaron los elencos municipales compuestos por chicos como la Banda Juvenil, la Orquesta Escuela, el Ballet Infanto-Juvenil de Tango y Folklore y grupos de percusión que acompañaron.

Como todos los años, colaboraron los Bomberos Voluntarios de la ciudad y el Ejército Argentino. Hubo un servicio de seguridad especialmente coordinado, estacionamiento y transporte gratuito para todos los barrios.

El cierre de la fiesta volvió a estar a cargo del grupo de clown y circo "La Pipetuá", con su obra denominada "La edad del pavo''", donde reúne las mejores escenas de sus espectáculos, con mucho humor y color, siendo un divertido entretenimiento para las miles de familias que se encontraban presentes.

Entre los eventos se presentó el grupo Mechongué. Además con todo el ritmo y color se sumó la batucada Comparsa "Bahía Ba". Durante la fiesta también hubo lugar para la magia y el clown, en una de las tantas opciones preferidas por los chicos.

En diálogo con EL POPULAR, Eseverri relató que "Olavarría es una sociedad que se ha hecho dueña de las fiestas populares, como los parques son una característica de nuestra ciudad, también lo son las fiestas populares. Lo que uno ve es que hay muchísima participación cada vez que hay una convocatoria abierta y gratuita como esta, y la sociedad evidentemente las necesita, las aprueba, las acompaña, y es un esfuerzo presupuestario que tenemos que hacer pero que la comunidad lo acepta".