Como ocurre de manera anual, las autoridades de seguridad del Municipio y la Policía bonaerense coordinaron una serie de procedimientos y operativos que se llevarán adelante entre la Nochebuena y Navidad, y que se replicarán para las celebraciones de Año Nuevo, aunque en esta oportunidad en el marco de una pandemia que ha cambiado completamente el estilo de vida en las comunidades. Los controles se apostarán en parques y sectores donde se presume se reunirán los jóvenes, y una decena de bares no abrirán sus puertas para evitar que se generen múltiples espacios de concentración.

Las tareas se coordinarán en base a distintas situaciones: los posibles espacios de concentración en zonas de esparcimiento para quienes salgan en las primeras horas del viernes 25, los controles de seguridad en el casco urbano y también la zona rural, con el foco puesto en evitar abigeatos, para lo que los operativos iniciaron ayer luego de una reunión con referentes de la Sociedad Rural Olavarría (SRO). En cuanto al control de los protocolos por Covid-19, se buscará que la cantidad de gente que se reúna en espacio abiertos no supere las 20 personas, y hagan uso de barbijos o tapabocas.

"Vamos a trabajar en relación a las distintas situaciones que se pueda llegar a suceder entre la noche del 24 y la madrugada del 25 con las herramientas que tenemos a disposición y coordinando con la fuerza de las comisarías, con el Comando de Patrullas, con el grupo de Infantería que también va estar trabajando y el grupo GAD", describió el director del Centro de Monitoreo Municipal, Daniel Manuel, para lo que se contará con alrededor de 30 móviles.

En la misma línea Roberto Landoni, titular de la Estación de Policía Departamental de Seguridad Olavarría, explicó que se va a reforzar "la zona de parques y espacios abiertos, y se va a agudizar en el Parque Mitre y las inmediaciones, que es donde mayormente se van a producir la concentración de gente". El comisario indicó que serán alrededor de 50 efectivos entre las distintas dependencias que integran la Estación, además de la colaboración de la SubDDI Olavarría, la División de Narcotráfico, y grupos operativos de Infantería y el GAD.

Manuel refirió a EL POPULAR que se tratará de poner en funcionamiento "la mayor cantidad de móviles municipales a modo preventivo y se va a dividir en lo que es la planta urbana sin dejar de atender por supuesto la zona rural". Las líneas de comunicación serán, como ocurre de manera natural, mediante el Centro de Monitoreo, por Ojos en Alerta y a través del número de emergencias 911.

Producto de que los procedimientos principales van a estar enmarcados en el Parque Mitre y otros parques cercanos, los propietarios de cerca de una decena de bares y restaurantes que se encuentran en los márgenes del arroyo Tapalqué, en Pueblo Nuevo y en el centro se comprometieron a no abrir sus puertas ni mañana 24 ni el jueves 31. "Eso puede llegar a reducir un poquito también el margen de conflictividad, porque además pueden abrir sólo hasta las 3 de la mañana", y gran parte de los controles se trasladará a los parques, refirió Manuel.

Una de las situaciones planteadas es sobre el control de los protocolos por la emergencia sanitaria, sobre lo que se aclaró que en cuanto a las viviendas particulares "apelamos a la responsabilidad de la gente". "De todas maneras vamos a tener a efectivos circulando, instando a la gente que tomen en consideración algunas cuestiones referidas al Covid, como a las reuniones de más de 20 personas en vía pública que se va tratar de desestimarlas", indicó el jefe del Centro de Monitoreo.

Zona rural

El lunes pasado miembros de la Subcomisión de Seguridad de la Sociedad Rural Olavarría se reunieron con autoridades de la Policía Departamental, del Comando de Prevención Rural y la Subsecretaría de Seguridad Municipal para solicitar medidas, como el incremento de patrullaje, debido a que "en esta época del año suele intensificarse el delito rural".

A través de las redes sociales de la SRO indicaron que "el subsecretario de Seguridad, Daniel Borra, se comprometió a ocuparse de solucionar el problema que tienen las distintas dependencias policiales a causa del déficit de combustible y al estado de las cubiertas de los patrulleros".

El compromiso fue reforzar "el área perimetral por donde se pueda llegar a ver algunos movimientos en relación a posibles hechos de abigeato y otras cuestiones delictivas", refirió Manuel. Para eso se pusieron a disposición móviles de Control Urbano, que se sumaron ayer ya a los procedimientos que se realizan desde el CPR y la Estación de Policía.